Gustavo Alcalde, sorprendido por la última muerte en la que no había indicios previos

El delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, ha calificado este lunes de "sorprendente" la muerte este domingo en Zaragoza de Rosario Roche, una mujer de 72 años que supuestamente fue asesinada a golpes por su marido con un martillo, por no haber indicios de malos tratos ni denuncias previas.

Así lo ha señalado a los medios tras presidir una concentración de repulsa contra la violencia machista a las puertas de la Delegación del Gobierno en Zaragoza.

Alcalde ha lamentado esta nueva víctima de violencia machista, la segunda muerte en lo que va de año en Aragón y la décimo séptima en España.

El delegado del Gobierno ha lamentado este suceso que ha afectado a una familia que los propios vecinos habían definido como "normal", en la que "no había denuncia previa ni antecedentes de ningún tipo, ni si quiera de una intervención social".

"No sabemos las causas que han llevado a Faustino a cometer semejante atrocidad", ha reconocido Alcalde, quien ha avanzado que será con las declaraciones de los forenses y los psiquiatras en el juicio posterior cuando se determinará qué ha podido ocurrir.

Según el delegado del Gobierno, el hijo pequeño, que sufre una discapacidad mental y también fue agredido por el padre, está fuera de peligro aunque permanece ingresado en la UCI, mientras que el mayor, al que el progenitor arrojó un cubo de lejía cuando acudió a la vivienda a su llamada, está ya en su domicilio.

Alcalde ha vuelto a hacer un llamamiento al conjunto de la sociedad para que ante cualquier indicio, duda o sospecha se presente la denuncia oportuna o se llame al número 016, "porque la prevención empieza antes. Una vez sucedido el hecho luctuoso solo nos queda lamentarnos", ha advertido.

El agresor, del que Alcalde ha asegurado desconocer los antecedentes de salud, permanece detenido ingresado en el Hospital Royo Villanova de la capital aragonesa.