Mariano, el taxista de los Goya, se estudió el trayecto... y hasta se hizo un croquis
El taxista al que dedicó su premio Irene Escolar relata cómo fue el trepidante trayecto de apenas diez minutos.
Mariano Ruiz Ortiz no se cree lo que le está pasando. De la noche a la mañana ha pasado de trabajar en el anonimato a ser el taxista más famoso de la ciudad y todavía no se lo explica. Desde la madrugada del sábado su teléfono no para de sonar y todos los medios le piden entrevistas. ¿Por qué? Por ser el taxista al que dedicó su estatuilla una emocionada Irene Escolar desde el escenario de la ceremonia de entrega de los Goya. Y es que, si no llega a ser por él, Irene no llega a recoger el premio.
La actriz actuaba este sábado en la obra de teatro 'El público' que se representaba en el Teatro Principal de Zaragoza. La obra terminaba a las 19.15 y su tren salía de la estación Delicias a las 19.43. Mariano supo esquivar las comparsas de carnaval y la dejó allí con su maleta a las 19.27. Antes de terminar su turno aquella noche el 'taxista de Zaragoza' ya era famoso y había recibido más de doscientos mensajes de whatsapp en su teléfono móvil.
"Me hizo muchísima ilusión que me nombrara. Yo estaba trabajando y a las 00.00 empezó a sonar el teléfono sin parar, así que intuí lo que acababa de pasar", comenta encantado este taxista que se declara fiel seguidor de los premios Goya.
Un trayecto estudiado
Lo que podría parecer una anécdota e interpretarse como un agradecimiento a un taxista veloz es mucho más que eso. Mariano no estaba en el teatro por casualidad aquella tarde. El martes anterior este mismo taxista recogió a varias personas de la productora de la obra de teatro 'El público' (Teatro Abadía) en la estación Delicias y las llevó hasta un hotel en la plaza de España. La productora le explicó el estrecho margen de tiempo al que se enfrentaría el sábado una de sus actrices y Mariano se comprometió a esperarla con su taxi detrás del Teatro Principal a partir de las 19.00. "En realidad llegué casi a las 18.00", recuerda divertido el taxista.
El problema llegó ese mismo día. Por la mañana Mariano se dio cuenta de que la carrera coincidiría con el desfile de comparsas de carnaval. Como se había comprometido a cumplir los tiempos, el taxista llamó al 010 para pedir información sobre los cortes de calles y habló con la Policía Local. Un agente "muy amable" le informó de a qué hora se cortaría cada calle y con eso Mariano se hizo "un croquis" y decidió el trayecto a seguir.
A las 19.15 la actriz salió del Teatro Principal corriendo, sin cambiarse ni desmaquillarse, cubriéndose con un abrigo la escasa ropa que llevaba en la función. "Entonces supe quién era. Yo no sabía a quién iba a buscar pero en ese momento la reconocí por su papel como Juana la Loca", explica Mariano.
"Hice el trayecto a la velocidad permitida, sin saltarme ningún semáforo y llegamos en apenas diez minutos". El taxista decidió cruzar el río por el puente de Hierro y recorrer la ribera por la margen izquierda para cruzar de nuevo por el puente de la Almozara y coger la avenida con el mismo nombre hacia la estación Delicias. "Se puede hacer y cualquier taxista de Zaragoza hubiese hecho lo mismo", asegura convencido mientras aprovecha para defender "el trabajo y la amabilidad" del gremio en Zaragoza.
Un 'trocito' de Goya
Según cuenta Mariano, Irene le dijo durante el trayecto que si ganaba el Goya "un trocito" sería para él, pero el taxista no se esperaba que se lo dedicase expresamente en la gala. A las 00.00 recibió un mensaje de la productora informándole de que Irene había dicho su nombre al recoger el premio y desde entonces el teléfono no ha parado de sonar. "A una clienta tuve que explicarle lo que me acababa de pasar porque no paraban de llamarme y de mandarme mensajes", recuerda.
A día de hoy el taxista confiesa que todavía no ha visto 'Un otoño sin Berlín', película por la que Irene Escolar se llevó el Goya a 'Mejor actriz revelación'. "No la he visto pero tengo clarísimo que la voy a ver", aseguraba a Heraldo este lunes.
El tren llegó a Madrid a las 21.10 por lo que la actriz no tuvo tiempo de estar lista para posar ante las cámaras en la alfombra roja pero sí pudo recoger el premio y vivir el momento en primera persona.
