"Vimos a un hombre arrodillado y llorando"

Dos camioneros búlgaros, ayer, en el aparcamiento.
"Vimos a un hombre arrodillado y llorando"
E. CASAS

En la noche del sábado al domingo, los camioneros búlgaros Milcho Manasiev y Kolio Krapenanski estaban sentados junto a sus vehículos en un lateral del aparcamiento del área de servicio de La Joyosa. Habían viajado desde Alemania con un cargamento de coches para un concesionario de Pamplona, pero tuvieron que detenerse 45 horas para cumplir las paradas reglamentarias. "A eso de las 12.00, vimos a un hombre que iba de un lado a otro de la explanada y que se arrodilló llorando y gritando -explicaron ayer por la mañana mientras se hacían la comida-. No supimos lo que pasaba, pero luego llegó la Policía y nos preguntó si sabíamos algo".

Cerca de allí, en una furgoneta acondicionada como autocaravana, el británico Beau Lamond contó que él también había escuchado los sollozos -todo apunta que del camionero detenido-. "Oímos unos lloros, parecía como si un hombre estuviera gritando el nombre de una mujer -relató-. Nos asomamos y vimos un grupo de gente y un hombre tumbado en el suelo, pero pensamos que se trataba de alguien que estaba borracho". Al igual que otros muchos camioneros, Lamond se enteró de la muerte del vecino de La Joyosa por los periodistas.