LA CRISIS EN ARAGÓN

TERUEL.  "Las tiendas se han resentido, pero lo peor viene ahora"

Patronal y sindicatos estiman que las compras de Navidad aliviaron la crisis del comercio, pero que la cuesta de enero será peor que nunca.

Los comercios de Teruel no se libran de la crisis derivada de la bajada del consumo. Aunque la campaña de compras de Navidad supuso un aumento notable de las ventas, como coinciden en señalar el secretario de la Cámara de Comercio, Santiago Ligros, y la secretaria de CC. OO., Mari Luz Benedicto, nada más pasar las fiestas ya se ha notado un descenso de la clientela en los establecimientos. "Las tiendas están resentidas por el menor número de ventas que ha habido a lo largo de 2008, pero lo peor puede venir ahora", afirmó la representante sindical.


No obstante, al menos por el momento, en la provincia no se ha producido el cierre de grandes establecimientos comerciales ni se han puesto en marcha expedientes de regulación de empleo en el sector. "Ha podido haber algún despido aislado, pero nada más", dijo Benedicto.


Liquidaciones y traslados


Lo que sí se ha notado es que algún establecimiento pequeño cambia de orientación comercial, se traslada a otro local, anuncia una liquidación del género por reformas, pospone la ampliación prevista o, incluso -en menor número de casos-, cierra sus puertas. Así lo explica Natalio Ferrán, gerente de un comercio de la capital turolense, quien afirma sin reparos que desde hace un año y medio "la gente compra con mucho miedo, porque falta el trabajo y no existe la alegría que había hace cinco o diez años".


Ferrán agregó que si bien es cierto que no se ha dado en el comercio turolense un goteo de despidos, algunas empresas han optado por no renovar contratos y no ampliar su plantilla ni siquiera temporalmente para las campañas de mayor venta. Otro efecto de la crisis, según este empresario, es que los establecimientos han dejado de hacer publicidad, lo que afecta también a otros sectores de la economía turolense.


Para la secretaria de CC. OO., las campañas de promoción realizadas por el comercio turolense desde antes de las fiestas navideñas tuvieron un efecto positivo, pues animaron a muchas personas a comprar.


Sin embargo, para Natalio Ferrán, pese a los descuentos y ofertas, "esta Navidad no se ha vendido tanto como otros años. El parón de la economía es tremendo". En su opinión, la gente ha dejado de consumir suprimiendo lo que considera gastos superfluos y esta actitud ha perjudicado a distintos comercios. El empresario señaló que al parón se suma el hecho de que los turolenses "siempre han comprado, y ahora muchísimo más, de una manera inteligente, nunca sin sentido como ocurre a veces en las grandes ciudades".