El juicio a la madre de los tres niños muertos en el incendio de Torrecilla será en marzo

Teruel. El juicio contra la madre, la tía y la abuela de los tres bebés que en enero de 2007 fallecieron en el incendio de una casa de Torrecilla de Alcañiz ya tiene fecha. La Audiencia Provincial de Teruel ha señalado la vista para los días 1 al 5 de marzo y será un jurado popular -integrado por ciudadanos- el que se pronuncie sobre la inocencia o culpabilidad de las tres mujeres, a quienes se les acusa de no haber hecho lo suficiente por salvar la vida de los niños durante el siniestro.

El proceso, como explicó ayer el fiscal jefe de la Audiencia Provincial, Jesús Gargallo, será "uno de los más largos, complejos y desagradables" de la historia judicial turolense, esto último por tener que sentar en el banquillo de los acusados a los familiares más cercanos de los tres pequeños fallecidos, especialmente a la madre. Durante los cinco días señalados habrá que reconstruir los hechos mediante las declaraciones de las tres imputadas, el relato de los numerosos testigos y las múltiples pruebas periciales.

"Se trata de un juicio con varios acusados, muchos testigos y complejas y abundantes pruebas periciales. Todo ello, lógicamente, dificultará y alargará en el tiempo el desarrollo de la vista", advirtió el fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Teruel.

Jesús Gargallo afirmó que una complicación añadida será el hecho de que el caso sea visto por un jurado popular, pues componer este tribunal exige no pocos trámites organizativos. El fiscal jefe expuso, además, la dificultad de sus integrantes, siquiera en ocasiones, para discernir y pronunciarse acerca de determinados matices jurídicos. "No resulta fácil, a veces, a personas no profesionales comprender lo que es, por poner un ejemplo, una atenuante o una agravante", indicó Gargallo.

Veintiún años de cárcel

La Fiscalía imputa a cada una de las tres mujeres tres delitos de homicidio por comisión de omisión, uno por cada niño fallecido, y solicita, también para cada una de ellas, un total de 21 años de prisión -siete por cada uno de los delitos-. La Acusación Pública considera en su escrito provisional de calificación que la madre, la tía y la abuela de los pequeños debieron coger a estos en los brazos y sacarlos de la casa cuando el edificio, de tres plantas, empezó a arder.

Los tres niños -dos gemelos de seis meses y otro de más de un año- se encontraban en sus cunas en la misma habitación cuando se produjo el incendio, cuyo origen no ha sido aclarado todavía. En opinión de la Fiscalía, durante el desarrollo del siniestro hubo tiempo suficiente de salvar a los pequeños.

El fiscal jefe matizó en su día que "no es que hubiera voluntad de matar, es que en un suceso así, la no acción equivale al ejercicio de la misma, porque hablamos de niños indefensos". La Fiscalía contempla una eximente incompleta de miedo insuperable, si bien sostiene que pudo hacerse más de lo que se hizo por salvar a los tres niños, que murieron intoxicados por la gran cantidad de humo que se produjo en la casa de Torrecilla de Alcañiz.

En el incendio otros dos hermanos de los fallecidos sufrieron heridas graves mientras que los dos restantes -eran siete hermanos en total-, junto con la madre, la abuela y la tía de todos ellos fueron atendidos por los servicios sanitarios por inhalación de humo. La madre, además, sufrió una crisis nerviosa.

La Fiscalía de Teruel considera que las tres mujeres, al ser las únicas personas adultas que había en la casa, eran las responsables de la seguridad de los pequeños. En el incendio también resultó herido un vecino que intentó rescatar por el balcón a los miembros de la familia ayudándose de la pala de una máquina excavadora y de algunos tablones.