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Investigan a dos camioneros irlandeses que conducían ebrios por la A-23 en Teruel
Ambos cuadruplicaban la tasa de alcohol permitida y sus vehículos circulaban de forma errática, invadiendo sin motivo el carril izquierdo
La Guardia Civil de Teruel investiga a dos camioneros de nacionalidad irlandesa que sobre las 20.00 del pasado 27 de abril conducían ebrios por la autovía Mudéjar o A-23 en sentido Francia a la altura de la localidad turolense de La Puebla de Valverde.
Ese día, la Guardia Civil tuvo conocimiento de la posible conducción errática de dos vehículos articulados matriculados en Irlanda, por lo que, rápidamente, las patrullas de servicio intentaron localizar a ambos camiones, según han informado este viernes desde la Comandancia de Teruel.
El primero de ellos fue interceptado a la altura del kilómetro 112 de la A-23. Los agentes actuantes, pertenecientes a la Plana Mayor del Subsector de Tráfico en Teruel, observaron que el camión circulaba de forma irregular, invadiendo el carril izquierdo de la autovía sin motivo aparente, por lo que procedieron a detenerlo.
Según relata la Guardia Civil, el conductor presentaba síntomas evidentes de conducir bajo la influencia del alcohol, por lo que se le practicaron pruebas de detección que arrojaron un resultado positivo de 0,69 y 0,58 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. La Benemérita recuerda que la tasa máxima permitida para conductores profesionales es de 0,15 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, por lo que el índice del chófer cuadruplicaba el nivel permitido.
En Monreal del Campo
El segundo vehículo fue detenido en el punto kilométrico 165 de la Autovía Mudéjar por agentes del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Monreal del Campo, en el término municipal de esta localidad. También el conductor presentaba síntomas de circular ebrio, arrojando en las pruebas de alcoholemia resultados positivos de 0,66 y 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.
Desde la Comandancia de Teruel destacan que ambos camiones iban cargados con material de cerámica procedente de la localidad de Villarreal (Castellón), por lo que en caso de haberse producido un siniestro vial "las consecuencias podrían haber sido fatales".
Las diligencias instruidas por la Guardia Civil por presuntos delitos contra la seguridad vial han sido remitidas a un juzgado y los conductores, puestos a disposición judicial.
Ambos chóferes podrían enfrentarse a penas de prisión de 3 a 6 meses, o multa de 6 a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y a la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 4 años.
