El primer helipuerto para emergencias sanitarias de Aragón con posibilidad de uso nocturno estará operativo el próximo mes de junio en Montalbán, según ha anunciado este lunes la consejera de Presidencia, Tomasa Hernández, durante una visita a las obras de la base, que están ejecutadas en un 90% y que supondrán una inversión de 120.000 euros. Esta helisuperficie garantizará el traslado a Zaragoza en 25 minutos frente a las dos horas que cuesta llegar por carretera.

La red de helipuertos, con 41 bases, permitirá evacuar con rapidez a los pacientes a los hospitales de referencia, aunque, actualmente, solo está disponible una helisuperficie nocturna hospitalaria, la del Hospital Militar de Zaragoza. La planificación del Gobierno aragonés contempla dotar de bases para el aterrizaje y despegue de helicópteros por la noche a cinco hospitales públicos más otras 36 en las comarcas.

Los nuevos hospitales de Teruel y Alcañiz, en fase muy avanzada de construcción, contarán también con sus respectivos helipuertos operativos las 24 horas. Los dos helicópteros de emergencias sanitarias del Gobierno aragonés tienen sus bases en Teruel y en la Base Aérea de Zaragoza, desde donde se desplazan a toda la Comunidad, pero, de momento, solo de día.

Tomasa Hernández explica que la prioridad a la hora de construir las helisuperficies de uso nocturno será la mayor distancia por carretera respecto de los hospitales de referencia. Añade que las primeras bases en construirse serán las de zonas que disten más de 45 minutos de los centros hospitalarios.

Tras las helisuperficie de Montalbán, que dará servicio a la comarca de las Cuencas Mineras, las siguientes en entrar en servicio serán las de Jaca (Huesca), Villanueva de Gállego (Zaragoza) y de la comarca de Gúdar-Javalambre.

Para completar la red, el Gobierno aragonés sufragará el 50% de la inversión total, cuantificada en seis millones de euros. Hernández añade que el objetivo final de todo el dispositivo es "salvar vidas".

"El Gobierno de Aragón tiene como objetivo que cada habitante de Aragón tenga a su disposición en una situación de emergencia, especialmente sanitaria, a los mejores técnicos y que pueda desplazarse en el menor tiempo posible. Con este proyecto que tenemos de crear una red de helisuperficies que puedan operar las 24 horas del día, las distancias se recortan hasta en hora y media en algunos casos", afirma Hernández.

El presidente de la Comarca de las Cuencas Mineras, Javier Larraz, recordó que la institución fue reticente a costear, como estaba previsto, el 100% de la inversión necesaria para habilitar el helipuerto de uso permanente, pero, finalmente, las obras han sido costeadas en un 50% por la DGA, un 25% la Diputación Provincial y el restante 25% por la Comarca.

Larraz considera "muy importante" para las Cuencas Mineras asegurarse la rápida evacuación de heridos y pacientes graves a un hospital zaragozano en caso de necesidad, también tras la puesta del sol. "Tendremos la oportunidad de realizar un vuelo nocturno ante una emergencia y estar en media hora en Zaragoza, en un hospital, ante cualquier patología grave como un ictus o un infarto. Igual que podemos hacerlo de día lo haremos de noche", indica.

Larraz agrega que el emplazamiento elegido, junto a los antiguos lavaderos del carbón que se transportaba a través de la línea ferroviaria que desembocaba en Zaragoza, se debe a sus condiciones orográficas, a que esta cerca del centro de salud de Utrillas, de la carretera nacional N-420 y en un lugar despejado de edificios altos y tendidos eléctricos.

El presidente comarcal explica que las obras de las base de helicópteros se terminarán en abril, pero a continuación el Gobierno aragonés deberá conseguir la autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea para realizar los vuelos nocturnos, lo que demorará la entrada en servicio hasta junio. Javier Larraz aclaró que el mantenimiento y la explotación de la infraestructura correrán a cargo de la DGA.

El proyecto para construir el helipuerto de Montalbán tuvo que licitarse dos veces ante las alegaciones del Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos, que recordó que el proyecto debía ser redactado por un ingeniero aeronáutico y que la dirección de las obras debía corresponder también a un profesional con esta misma cualificación. Una vez corregidas las deficiencias, la obra salió de nuevo a concurso.