mundo rural

La Estrella se apaga: sus dos últimos habitantes se marchan

Los únicos residentes durante el último medio siglo, un matrimonio octogenario, abandonan la pedanía de Mosqueruela.

Martín Colomer y Sinforosa Sancho, cuando residían en su casa de La Estrella.
Martín Colomer y Sinforosa Sancho, acompañados de sus gatos, cuando residían en su casa de La Estrella.
Jorge Escudero

Un símbolo de la resistencia contra la despoblación de la España rural desaparece. El matrimonio de octogenarios formado por Martín Colomer, de 88 años, y Sinforosa Sancho, de 89, acaba de abandonar su residencia en La Estrella, una pedanía de Mosqueruela de la que han sido los únicos habitantes durante más de medio siglo

La resistencia del matrimonio como únicos pobladores de una localidad que llegó a contar con cerca de 300 habitantes en los años cuarenta del siglo XX les valió numerosos reportajes en medios de comunicación de todo el país y el protagonismo en una campaña publicitaria de la firma automovilística Land Rover con motivo de la Navidad de 2018.

Los problemas de salud de la pareja han motivado su salida de La Estrella, un lugar que, gracias a ellos, ha sido un referente contra el vaciamiento de la España interior. El matrimonio, cuyo único hijo vive en la cercana localidad castellonense de Villafranca del Cid, se ha trasladado a vivir a la provincia de Castellón.

El matrimonio apenas salía de la pedanía salvo para hacer la compra, una tarea de la que, habitualmente, se encargaba Martín. Su esposa, natural de La Estrella, solo vivió fuera del pueblo durante un corto tiempo para recuperarse de una fractura sufrida en un accidente doméstico. 

Martín, natural de una masía de Villafranca del Cid, llegó al barrio de Mosqueruela en los años cuarenta del siglo XX dentro de la política gubernamental de aislamiento del maquis. Allí se casó y vivió hasta hoy. Frecuentaba Villafranca, localidad a la que acudía los sábados con motivo del mercado semanal para comprar lo necesario y ver a su hijo antes de volver a su casa, en un edificio situado junto al santuario de la Virgen de La Estrella. Cuidaba del huerto y, más recientemente, de una plantación de encinas para la truficultura. Sinforosa se encargaba de los animales del corral y también alimentaba una legión de gatos que se dejaban ver por la plaza.

Al quedar despoblado, los propietarios de las casas de este núcleo se organizarán para visitarlo con frecuencia para evitar que quede desprovisto de toda presencia urbana. Una fuente vecinal indicó que existen contactos para que una pareja se pueda instalar en este pueblo antes del próximo verano para tomar el relevo de Martín y Sinforosa. 

La Estrella, situada a 25 kilómetros de camino de Mosqueruela, exhibe como principales referencias históricos las inundaciones sufridas en 1833, que provocaron la muerte de 26 vecinos, y haber sido la cuna del famoso torero de los años treinta Silvino Zafón, el Niño de la Estrella. Ahora se añade un tercer hito, su despoblación en febrero de 2023. 

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