política

Feijóo anuncia en Teruel un decálogo contra la despoblación con las rebajas fiscales como bandera

El presidente del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno adelanta que ampliará las bonificaciones a las empresas al máximo permitido.

Alberto Núñez Feijóo saluda a los asistentes a la convención acompañado de Jorge Azcón, Emma Buj y Joaquín Juste.
Alberto Núñez Feijóo saluda a los asistentes a la convención acompañado de Jorge Azcón, Emma Buj y Joaquín Juste.
Javier Escriche

El presidente del PP y candidato a la presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, ha presentado este viernes en Teruel el decálogo que aplicará contra la despoblación si es elegido presidente. Las 10 medidas presentadas en el marco de una convención estatal sobre la regresión demográfica del mundo rural, hacen un especial hincapié en las rebajas fiscales, que incluirán la exención tributaria por comprar o rehabilitar viviendas en pueblos y los descuentos o condonaciones parciales o totales por asentar empresas y negocios. 

El dirigente popular ha terminado su listado de medidas contra la despoblación con el anunció que ha generado más aplausos entre el público que llenaba el auditorio del centro social de San Julián: aplicar la máxima bonificación a los costes laborales que permite la Unión Europea a las empresas radicadas en las provincias de Teruel, Cuenca y Soria. Feijóo ha afirmado que su partido, si gobierna, irá a la "máxima" rebaja posible, lo que supone el 20% de los costes laborales -incluidos salarios y cotizaciones- frete al 1% que aplica el Gobierno desde el pasado enero a través de un descuento de las cotizaciones a la Seguridad Social. 

El decálogo anunciado por el presidente del PP incluye la creación de un foro permanente en el que estarán incluidas todas las administraciones para planificar de forma unificada las medidas contra la despoblación, la flexibilización de los requisitos de empadronamiento para que una persona pueda estar inscrita una temporada del año en un municipio y otra en otro, la exención de impuestos por comprar y rehabilitar viviendas en el medio rural, fomentar el asentamiento de industrias y negocios en los pueblos con ventajas fiscales, priorizar la generalización de la banda ancha en la aplicación de los fondos europeos, incrementar la formación de médicos para la atención primaria y aplicarles ventajas económicas y de puntuación para progresar en la carrera profesional, facilitar la conciliación familiar, facilitar la llegada de industria y comercios con bonificaciones tributarias y alcanzar el 20% en el descuento de costes laborales a las empresas de Teruel, Cuenca y Soria. 

El candidato popular a la presidencia del Gobierno ha clausurado con su intervención la jornada 'La España de los pueblos y la Europa rural', organizada por el PP con la colaboración del grupo popular del Parlamento europeo. Feijóo ha recordado su origen rural -nació en una pedanía de La Peroja (Orense)- y también su labor al frente de la Xunta de Galicia para atender las necesidades de los pueblos. Ha reivindicado la importancia del medio rural para la economía y el medio ambiente y ha señalado que la lucha contra la despoblación, principalmente grave en el interior peninsular, es "un asunto de Estado" y debe abordarse con políticas de largo plazo. 

Según ha asegurado, el PP fue el primer partido que, en el ámbito estatal, se preocupó por el problema de la despoblación y ha recordado que fue un gobierno popular el que creó en 2017 la primera secretaria de Estado para el reto demográfico.

La jornada nacional sobre despoblación ha contado con la presencia de representantes populares de todo el país. La bienvenida ha corrido a cargo de la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, que ha recordado que la provincia es un "referente de despoblación -su densidad poblacional, 9 habitantes por kilómetro cuadrado es la segunda más baja del país, solo por encima de Soria-, pero también en la lucha contra este problema".

La primera intervención ha corrido a cargo del vicepresidente del grupo popular del Parlamento europeo, Esteban González Pons, que ha reconocido que será imposible repoblar el interior peninsular, pero ha defendido políticas que permitan mantener los habitantes y los servicios para que el fenómeno no degenere en la "desertización". González Pons ha añadido que en cuanto a la despoblación "no todo son malas noticias" porque, a su juicio, el problema está en sus inicios y puede corregirse. Para el europarlamentario, es prioritario planificar las actuaciones para conseguir resultados. 

Ha destacado los "atractivos" de la provincia y, a título personal, ha recordado que el mismo ha elegido la localidad turolense de Alcalá de la Selva como el lugar al que quiere ir a vivir "en el futuro", un destino que comparte con miles de residentes en la Comunidad Valenciana.

La jornada ha incluido mesas redondas sobre prácticas desarrolladas contra la despoblación y otra sobre los alcaldes rurales y la Unión Europea. Entre los ponentes ha figurado el economista José Antonio Herce, que ha puesto de manifiesto la insuficiencia alarmante de la oferta residencial en los pueblos, uno de los principales inconvenientes para atraer nuevos residentes. 

El vicepresidente de Cepyme-Teruel, José Antonio Guillén, ha incidido en la necesidad de que las ayudas al funcionamiento de las empresas incrementen su "alcance" para que sean eficaces para generar empleo y atraer población. Ha advertido de que si no se refuerzan no darán resultado y la Unión Europea podría eliminarlas al evaluar los resultados. Por el contrario, si se incrementan y consiguen objetivos, Teruel, Soria y Cuenca pueden convertirse en "la Noruega" de las provincias del interior de España, en referencia a que las patronales de Teruel, Cuenca y Soria han apelado al exitoso ejemplo noruego para conseguir que Europa autorizara, como excepción, aplicar las bonificaciones a estas tres provincias.

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