El senador del Partido Popular por Teruel Manuel Blasco ha afirmado este lunes que su partido "no consentirá" que la comunicación por carretera entre la capital turolense y Cuenca "sea un embudo". 

Blasco ha rechazado así la posibilidad barajada por el Ministerio de Transportes de resolver la proyectada autovía entre ambas ciudades, la A-40, con una carretera de doble sentido con carriles para vehículos lentos en los puertos de montaña. Blasco ha recordado que entre Madrid y Cuenca ya hay una autovía -doble calzada para cada sentido- por lo que cambiar estas características entre Cuenca y Teruel "sería ir a peor".

 En el mismo sentido se ha pronunciado la alcaldesa de Teruel, Emma Buj. "Mientras yo sea alcaldesa no renunciaré a la A-40, porque queremos dejar un futuro mejor para todos los turolenses", ha dicho Buj. La regidora ha destacado que la A-40, que conectaría la provincia con Madrid a través de su capital, es "crucial" para el desarrollo del territorio, que ya cuenta con un aeropuerto y una polígono industrial de última generación, Platea.

El PP en Teruel defiende también la conversión de la N-211 entre Alcolea del Pinar y Monreal del Campo en autovía, la A-25. En este caso, igualmente el Gobierno central estudia la posibilidad de que la carretera sea de doble sentido si bien con carriles para vehículos lentos que agilicen la circulación en los tramos de montaña, una solución que no convence al PP. 

El alcalde de Monreal del Campo, Carlos Redón, ha subrayado que la A-25 "es el futuro para todo el Jiloca", ya que conectaría la A-2 con la A-23 a la altura de Teruel y el Mediterráneo sorteando las comunicaciones más congestionadas por el tráfico y potenciando el desarrollo de la localidad como nudo de carreteras.

Desde el PP han calificado de "engaño" la actuación del PSOE, "por haber prometido autovías y ahora no hacerlas".