La ciudad de Alcañiz contará con un gran dispositivo de seguridad los próximos días 10 al 12 de septiembre, cuando se celebre en las instalaciones de Motorland el Gran Premio de Aragón de MotoGP correspondiente a 2021, el primero que tendrá lugar con público en las gradas desde que se desatara la pandemia de coronavirus.

Así lo anunció este martes el subdelegado del Gobierno en Teruel, José Ramón Morro, quien afirmó que, pese a que el aforo máximo permitido será solamente de 20.000 personas debido a las restricciones por la covid-19, el número de agentes de la Guardia Civil y la Policía Local que se ocuparán de mantener el orden durante la celebración de la prueba de motociclismo será el mismo que si las instalaciones acogieran espectadores al 100% de su capacidad, es decir, de 70.000 a 80.000 asistentes.

No obstante, lo que preocupa no es el comportamiento de estas 20.000 personas en Motorland, sino qué ocurrirá cuando todas ellas abandonen el circuito a partir de las 16.00 –al finalizar la jornada de competición– y se trasladen al casco urbano para conocer la ciudad y disfrutar de un día de fiesta. "Habrá efectivos suficientes y todo saldrá bien; está garantizado, porque hemos dispuesto todo para ese escenario de afluencia de gente y nos movemos con esas cifras", aseguró Morro.

El subdelegado del Gobierno en Teruel expresó su confianza en que las restricciones de aforo por la covid se traduzcan en la llegada de un público de proximidad, procedente del resto de la provincia de Teruel o de Zaragoza, que tenga la posibilidad de regresar a su casa acabada la prueba y volver a Alcañiz al día siguiente para seguir viendo la competición.

Morro comentó que, de hecho, los alojamientos hoteleros de Alcañiz están ya reservados por los organizadores de la competición así como por los pilotos y sus familias.

El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Alcañiz, Kiko Lahoz, no ocultó su preocupación por la llegada de esas 20.000 personas cuando la pandemia no ha desaparecido todavía. El edil explicó que en la ciudad apenas quedan plazas de alojamiento para 1.000 ó 1.500 personas, todas ellas localizadas en Viviendas de Uso Turístico (VUT) y pisos de alquiler, por lo que serán muchos los visitantes que tendrán que buscar hospedaje en poblaciones cercanas, como Calanda o Andorra, con el consiguiente desplazamiento cuando finalice la actividad en Motorland.

El concejal de Deportes añadió que "es difícil controlar a una marea de gente" y hacer que esta respete las restricciones de horario impuestas por la covid y que obligan a cerrar los establecimientos hosteleros a las 00.30. Puntualizó, no obstante, que este año "serán muchos los que vengan solo a ver la competición y menos los que esperen una fiesta en la calle".

Kiko Lahoz agregó que el peligro puede venir, únicamente, "si se organizan botellones en masicos y casas particulares", ya que a diferencia de otros años, no habrá conciertos en la calle ni barras de bar.

El subdelegado del Gobierno se refirió al dispositivo previsto en Motorland durante la presentación de los diez policías nacionales en prácticas que se incorporan este verano a la Comisaría provincial para desarrollar la última fase de su formación. Morro, que estuvo acompañado por el comisario provincial, Fernando Mencía, recordó a los agentes que Teruel es un territorio "muy seguro", pero también muy extenso y por ello más difícil de controlar.