La muerte de un anciano eleva a siete las víctimas de la covid-19 en la residencia de Burbáguena

El fallecimiento este jueves de un residente eleva a siete las victimas mortales de la covid-19 en la residencia de la tercera edad Casa Familiar de la Inmaculada de Burbáguena. Se trata del primer fallecido varón tras las seis mujeres alojadas en el geriátrico que han perdido la vida en las últimas dos semanas como consecuencia de la pandemia. 

Desde que se destapó el brote de coronavirus en el geriátrico, gestionado por los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca, se han contagiado 76 personas, entre residentes y trabajadores. En el establecimiento, que contaba con 96 usuarios al iniciarse la oleada de contagios, permanecen 45 ancianos, 33 de ellos positivos, mientras que otros 24 están ingresados en el hospital Obispo Polanco de Teruel y 18 han sido trasladados a centros covid, 17 de ellos negativos y un contagiado.

Recientemente, a petición de la dirección de la residencia, los bomberos de la Diputación Provincial realizaron una exhaustiva labor de desinfección del entorno del establecimiento y también de las dependencias interiores. Es la única residencia que ha demandado este servicio con la segunda ola de la covid-19, aunque durante el primer embate de la epidemia se intervino en 50 de toda la provincia.