Los colectivos y agentes sociales más representativos de la ciudadanía turolense critican unánimemente la trifulca entre el Ayuntamiento –del PP– y el Gobierno de Aragón –del PSOE– a cuenta de las obras del hospital, iniciadas a un mes de los comicios generales de este domingo. Todo ello después de que la alcaldesa, Emma Buj, firmara un decreto que ordena a la DGA paralizar los trabajos por falta de licencia y en el que se contempla precintar los accesos al terreno. La orden será recurrida por el Ejecutivo Autonómico.

El portavoz de Teruel Existe, Manuel Gimeno, manifestó sentir “vergüenza” como ciudadano “de que el hospital se esté usando como arma arrojadiza”. Sin querer valorar cuál de las dos instituciones puede tener razón, Gimeno censuró las pegas del Ayuntamiento “a que se coloquen tres grúas a un lado del terreno” y el “oportunismo” de la DGA al empezar, a un paso de las elecciones, unas obras que arrastran décadas de demora, si se tiene en cuenta que ya en 1982 se puso en la zona de Los Planos la primera y fallida piedra de un nuevo hospital para Teruel. “Los partidos se boicotean sin importarles jugar con la salud de los ciudadanos”, dijo.

El presidente de CEOE-Teruel, Carlos Torre, calificó de “desagradable” lo ocurrido y pidió a los partidos políticos “que pongan todo de su parte para sacar adelante una inversión muy necesaria para Teruel”. El representante de los empresarios en la provincia mostró su preocupación porque “cuando algo empieza a moverse en Teruel, salen los problemas y los únicos perjudicados son los ciudadanos”.

En la misma línea, el presidente del Colegio de Médicos, Ismael Sánchez, mostró su pesar por la polémica y reivindicó “un pacto por la sanidad”. “Los proyectos sanitarios –subrayó– deben estar apoyados por todos los partidos; siento que no haya más capacidad para llegar a acuerdos”.

Desde el sindicato médico CESM-Teruel señalaron que lo ocurrido es “otro esperado episodio de la tomadura de pelo en que se ha convertido el nuevo hospital de Teruel”. “Falta voluntad de hacer la obra –denunciaron–, si la hubiera, tomarían un camino común”.

La secretaria provincial de CC. OO., Pilar Buj, tachó de “bochornosa” la situación y destacó que “PP y PSOE han tenido en sus manos hacer el hospital y a día de hoy no tenemos nada, porque tres grúas siguen sin ser nada”. Por su parte, el líder de UGT en Teruel, Alejo Galve, calificó de “barbaridad” que el Ayuntamiento “paralice una obra tan importante para Teruel” y pidió “diálogo” para no hacer “más daño a Teruel”.

El presidente de la Federación de Vecinos de Teruel, Pepe Polo, consideró que “las instituciones deben estar al margen de la guerra de partidos” y reclamó “consenso” para ejecutar las grandes infraestructuras.