"Lo mejor ha sido repartir el premio; nosotros tendremos que seguir madrugando para traer a Teruel nuestra fruta". Herminio Zaragoza, un vendedor ambulante de Foios (Valencia) que lleva 47 años instalando cada jueves y sábado su puesto en el mercado de Los Arcos de la capital turolense, estaba este sábado pletórico de alegría al saber que había repartido entre sus clientes y varios vecinos de puesto 60.000 euros en participaciones de un quinto premio.

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Rodeados de mandarinas, granadas y piñas y con una sonrisa de oreja a oreja, Herminio y su hijo Adrián, de 21 años, que también trabaja en el negocio, recibían las felicitaciones de los clientes, que les animaban a brindar por la fortuna traída a Teruel. Sin pensárselo dos veces y como si hubiera soñado que este sábado llegaría ese gran momento y habría que celebrarlo, el padre se dio media vuelta y volvió de inmediato con unos vasos de plástico y unas botellas cuyo contenido ofreció a todo el mundo.

"No me hagan brindar más, que me empipo y luego regalaré el género", decía entre risas el veterano vendedor al tercer vaso de licor. "Esto no da para cambiar la vida, pero es un regalo muy bien venido en estos días y por eso estamos tan contentos", añadía. Al vivo colorido de la mercancía expuesta en su tenderete se sumaban las caras de ilusión de algunos afortunados, aportando una luz especial a este rincón del mercadillo turolense.

Adrián Zaragoza no ocultó que alguna participación del número agraciado, el 47.862, guardaba en sus bolsillos. "A ver si puedo comprarme un coche, que ahora se lo tengo que ‘robar’ a mi madre", contó. En total, desde este puesto ambulante de frutas y verduras se vendieron 80 papeletas, repartidas, principalmente, "entre clientes fijos y compañeros de venta en este mercado". Por cada boleto de tres euros -se jugaban en realidad 2,40 euros- el portador recibirá 750 euros.

"Es una buena paga extra"

Uno de los afortunados era Ángel Miguel Pérez, cuyo puesto de venta de encurtidos está casi enfrente del de Herminio Zaragoza. "Compré dos papeletas, no da para mucho, pero es una buena paga extra en Navidad", relataba mientras servía a un cliente las olivas y pepinillos que este le había solicitado.

Vecino de Requena (Valencia), Ángel Miguel Pérez también es otro vendedor habitual del mercadillo turolense de los sábados en la zona de Los Arcos. "Me gusta el sitio, no está cerca, porque son 126 kilómetros de distancia lo que tengo que recorrer para venir y otros tantos para regresar, pero este trabajo es así", explicaba. Coincidía con Herminio Zaragoza en que lo peor "es el frío que hace a las ocho de la mañana en invierno".

El 47.862, dotado con 60.000 euros a la serie, fue el premio más madrugador de todos los que arrojaron ayer los bombos de la Lotería Nacional. No había transcurrido ni media hora desde el inicio del sorteo cuando esta cifra apareció con uno de los ocho quintos premios.

El número es el que vendía la comisión de fiestas de la localidad valenciana de Foios, a la que está vinculada la familia de vendedores ambulantes. Sus participaciones trajeron ayer al mercadillo de Teruel la ilusión de la Navidad. No era la primera vez que la familia Zaragoza repartía dinero en boletos de la Lotería Nacional, pero nunca con un premio tan sustancioso. "Habíamos dado reintegros, pero tanto dinero, nunca, por eso estamos tan felices", manifestaba Adrián.