Desarticulada una organización criminal que vendía drogas en Teruel y Guadalajara

La Guardia Civil, en el marco de la 'Operación Recechado', ha desarticulado una organización criminal dedicada a la venta de drogas en las provincias de Teruel y Guadalajara, deteniendo a 14 personas e intervenido importantes cantidades de cocaína y hachís. Además, ha desarticulado diez punto de venta ubicados en localidades de la comarca del Jiloca y de la provincia de Guadalajara.

Las investigaciones seguidas por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Teruel, se iniciaron al detectarse a principios de febrero a varios individuos que supuestamente se dedicaban a la venta de droga  por la comarca del Jiloca. Tras diez meses de investigación se han interviniendo un total de 137 gramos de cocaína, 99 bellotas de hachís y unos 850 gramos de hachís para su distribución.

A los detenidos, con edades comprendidas entre los 28 y 57 años, se les imputa los delitos de pertenencia a grupo criminal y contra la salud pública por tráfico de drogas. Todos ellos, junto a la droga y resto de material intervenido, fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de los de Teruel, cuyo titular decretó el inmediato ingreso en prisión de nueve de los detenidos.

Droga oculta en zulos

Las personas que dirigían el grupo disponían de una organización perfectamente estructurada y especializada, tanto es así que ocultaban la droga enterrada en zulos dispersos por el monte y también en trasteros alquilados a terceros. Los dirigentes del grupo contaban con una "virtual desvinculación", pues procuraban tener la droga en pequeñas cantidades y por poco tiempo.

Desarticulación de diez puntos de venta en las provincias de Teruel y Guadalajara

La Operación se produjo en tres fases durante los meses de octubre y noviembre, llevándose a cabo 12 registros en domicilios y 3 en trasteros y garajes en las localidades de Ojos Negros, Monreal del Campo y Calamocha en la provincia de Teruel y de la localidad de Molina de Aragón de la provincia de Guadalajara.

Además de la droga, se ha intervenido también varias básculas de precisión, varios móviles, 3.970 euros en metálico, cuatro vehículos, dos catanas, un puñal, así como diversos elemento utilizados para la venta, corte y distribución de la droga.

La complejidad y dimensión de las fases de explotación precisó de la actuación conjunta de la Unidad Orgánica de Policía Judicial y de más de una docena de agentes de la Compañía de Calamocha, Equipo ROCA de Molina de Aragón, así como de los perros detectores de drogas del Grupo Cinológico de la Comandancia de Zaragoza.