Los vecinos afectados por el derrumbamiento del cerro Pui Pinos de Alcañiz han trasladado al Ayuntamiento su preocupación por poder recuperar los enseres de las viviendas y el temor de que otras personas puedan robar sus pertenencias.

En una reunión entre los afectados, la dirección de obra y los responsables municipales, los vecinos preguntaron este martes si podrán estar presentes en el momento del desescombro de las cocheras situadas en la parte inferior, para intentar salvar alguna pertenencia, indicándoles previamente a los operarios que intervendrán, según informa el Ayuntamiento en un comunicado.

Los responsables municipales se comprometieron a tomar medidas para que puedan hacerlo "de una manera controlada" según indican las mismas fuentes.

Otra cuestión que preocupa a los vecinos es la seguridad en la zona y por ello pidieron que se incremente la vigilancia por miedo a que otras personas puedan entrar y sustraigan objetos de sus viviendas.

Reuniones cada ocho o diez días

También demandan más comunicación por parte del Ayuntamiento, por lo que el Consistorio aseguró que su intención es celebrar reuniones como la de este martes cada ocho o diez días para mantener a los vecinos lo más informados posible y estar en constante comunicación.

Con esta reunión, añade el comunicado, el Ayuntamiento y la dirección de obra querían informar de primera mano a los afectados de las labores técnicas que hasta ahora se han hecho y lo que se va a hacer a continuación.

Obras

La dirección de obra, de la empresa EID, explicó los primeros trabajos que consistieron en la retirada de los escombros desde la parte superior del cerro hacia abajo de manera controlada, para evitar más derrumbes y que otras viviendas quedarán afectadas.

El siguiente paso fue la realización de un canal en el centro del cerro por el que se empujan los restos de tierras y la retirada de gran cantidad de escombros.

Según la dirección de obra, las dos viviendas en situación más crítica tienen hasta la primera planta de tierra, y calculan que a lo largo de esta semana puedan retirarla de la parte de atrás y se pueda realizar otro triaje, añade la nota.

En este sentido, la dirección de obra ha reiterado que el riesgo cero no existe y que las dos entradas a los domicilios para recoger los enseres que se han hecho hasta ahora han sido porque estas casas tienen menor riesgo.

También se espera que a lo largo de esta semana se pueda empezar a desescombrar las cocheras situadas en la parte de abajo.

Los siguientes pasos serán estudiar si las viviendas que han quedado en pie son estables y también si lo son los laterales del cerro.

En este sentido, añade el comunicado, se tomarán medidas de seguridad para evitar futuras situaciones similares.

Hasta el momento, trabajan en la zona cuatro equipos de profesionales: la empresa EID (formada por arquitectos, ingenieros de caminos y aparejadores); los técnicos municipales, los técnicos de la empresa GEODESER y los arqueólogos de Diputación Provincial de Teruel.