Un total de 8.574 pacientes pertenecientes a 30 municipios turolenses limítrofes con la Comunidad Valenciana podrán recibir atención médica integral en este último territorio merced a un convenio de colaboración recíproca suscrito ayer entre las consejerías de Sanidad de Aragón y Valencia.

Presidentes de las comarcas turolenses beneficiarias mostraron su confianza en que el acuerdo frene la galopante despoblación que sufren estos territorios, muchos de cuyos vecinos –principalmente jubilados– se empadronan en localidades valencianas para poder acudir a centros sanitarios de esta comunidad, más cercanos que los de Teruel. Así está ocurriendo, por ejemplo, en Arcos de las Salinas.

"Es un gran avance", aseguró ayer la presidenta de Gúdar-Javalambre, Yolanda Sevilla. "Hay pueblos con 100 habitantes –continuó– que ven cómo un 4% de sus vecinos se inscriben en otros municipios para poder ir al médico sin desplazamientos tan largos y eso supone una pérdida de aportaciones económicas estatales importante". A su juicio, la posibilidad de recibir asistencia sanitaria en Aragón o Valencia indistintamente "es una ayuda contra la despoblación".

Además de Gúdar-Javalambre, las comarcas del Matarraña y el Maestrazgo también se beneficiarán del pacto. Por parte de Valencia, 2.460 habitantes de ocho poblaciones podrán acudir a centros sanitarios de la provincia de Teruel, concretamente los de Ademuz, Casas Altas, Casas Bajas, Castielfabib, Torrebaja, Vallanca, Puebla de San Miguel y Herbés.

Caducado desde 2011

Un acuerdo similar existía ya anteriormente, pero estaba caducado desde 2011. El nuevo convenio, plasmado en un documento que fija el marco legal dentro del cual actuar, amplía la cobertura al incluir la atención especializada en salud mental para el enclave valenciano del Rincón de Ademuz, cuyos vecinos podrán hacer uso del centro de Salud Ensanche, del hospital Obispo Polanco y del centro de rehabilitación psicosocial San Juan de Dios, todos ellos en la capital turolense.

El convenio establece que los ciudadanos de las zonas limítrofes de Aragón y Valencia podrán ser asistidos tanto en atención primaria como en especializada por profesionales sanitarios de ambas comunidades. El transporte sanitario no urgente será garantizado por la comunidad de origen, pero en caso de dificultad, la prestación se asegurará indistintamente. En caso de urgencia, se movilizarán los recursos más adecuados.