Alejandro Ibrahim indicó que factores negativos para la provincia, como la despoblación, la altitud y el clima seco y frío son los principales alicientes para usar Teruel como aparcamiento de aeronaves. Anunció que el próximo enero llegará un nuevo operador al aeropuerto: una prestigiosa escuela de pilotos británica.

Jemma Markham, propietaria de Torre del Visco –un establecimiento hotelero que ha dinamizado el sector hostelero en el Matarraña con la calidad como bandera–, coincidió con Ibrahim en que la despoblación ha contribuido a conservar un paisaje que es un "paraíso" para los amantes de la naturaleza. Afirmó que la provincia dispone de recursos suficientes para desarrollar su turismo pero echó de menos la agrupación de la oferta para mejorar el "impacto" en el mercado nacional y exterior. A su juicio, la oferta hotelera del Matarraña es suficiente pero falta una oferta que mejore la ocupación fuera de temporada y entre semana. El consultor Luis Jaime Gómez también defendió la necesidad de "unir fuerzas" para promocionar una oferta basada en la sencillez y la naturalidad, dos recursos de la provincia con grandes posibilidades turísticas.