Los trabajos para reformar la carretera A-1701 en el tramo de 15 kilómetros que une la localidad de Mosqueruela con el límite provincial de Castellón han comenzado en los últimos días. La actividad, previa a la llegada de la maquinaria pesada que moverá la tierra para cambiar el trazado, se centra en el desbroce y en la limpieza de los márgenes, así como en los últimos análisis topográficos sobre el terreno.

La A-1701 a su paso por Mosqueruela es una de las peores carreteras de la provincia de Teruel, con un sinuoso trazado que data de hace un siglo y una capa de rodadura muy deteriorada por los efectos del hielo y la sal y por la falta de mantenimiento. Pese a que se trata de una vía de entrada de turismo desde la vecina provincia de Castellón, la calzada está totalmente parcheada y carece de señales horizontales que dividan los dos carriles o marquen los arcenes.

Las obras, con un presupuesto de 1,8 millones de euros, se dilatarán hasta finales de 2016, según afirmó el director general de Carreteras del Gobierno aragonés, Miguel Ángel Arminio. La DGA, titular de la A-1701, fía la financiación del proyecto al Fondo de Inversiones de Teruel (FITE), alimentado al 50% por el Gobierno central y el Ejecutivo autónomo y cuya dotación –60 millones de euros anuales– se aprueba y se distribuye cada año.

Tres fases

Los trabajos se desarrollarán en tres fases. La primera de ellas es la que acaba de comenzar y se prolongará hasta el próximo 31 de agosto. La segunda etapa comenzará en la primavera de 2015, coincidiendo con el nuevo FITE, para acabar igualmente después del verano de ese año. Tras otro intervalo invernal, las obras se reanudarán en los primeros meses de 2016 para finalizar a finales de ese mismo año.

Según Arminio, no solo el FITE marcará el ritmo de las obras sino que estas se desarrollarán también de acuerdo a las condiciones climáticas del Maestrazgo, comarca por la que discurre la carretera y en la que las frecuentes heladas invernales y las bajas temperaturas impiden avanzar en su reforma.

El director de Carreteras del Gobierno aragonés destacó la importancia de la mejora de la A-1701, tanto por el mal estado que presenta como por su papel de vía de entrada de turismo de la Comunidad Valenciana. Añadió que se ha "aprovechado" el FITE para poder dar celeridad a un proyecto "necesario" en unos momentos complicados desde el punto de vista económico.

El procedimiento de la DGA para llevar a cabo las obras será utilizar sus propias brigadas de operarios si bien recurriendo a un contrato de suministros y maquinaria pesada con una empresa privada.

Miguel Ángel Arminio subrayó que, una vez comenzadas las obras, no habrá interrupciones en el desarrollo del proyecto, al menos atribuibles a cuestiones monetarias. Aclaró que si el Fondo de Inversiones de Teruel no llegase a garantizar la financiación de los trabajos en algún momento, el Gobierno aragonés llevaría a cabo una provisión de fondos con recursos económicos propios. "Este proyecto ya no se puede parar", zanjó el director de Carreteras.

La alcaldesa de Mosqueruela, María Isabel Gil, expresó su satisfacción por el inicio de las obras. "Una buena carretera atraerá inversiones a los municipios del Maestrazgo y mejorará nuestro futuro", manifestó Gil.

La carretera pasará de tener apenas tres metros de anchura sin línea divisoria a una calzada de siete metros –tres para cada carril y medio metro para cada uno de los dos arcenes– con un trazado con muchas menos curvas. "Se podrán cruzar vehículos pesados sin ningún problema, no como ocurre ahora", indicó Miguel Ángel Arminio.

Los trabajos prevén la supresión de algunas curvas y el ensanchamiento de la calzada en varios puntos, lo que se traducirá en un acortamiento de las distancias. Además, se renovará todo el firme.