SANIDAD

La residencia de Martín del Río, en marcha el próximo mes de septiembre

El centro dispondrá de modernos sensores para seguir los movimientos de los enfermos de alzhéimer por las instalaciones.

Un vecino contemplaba las obras en la primavera de 2010.
La residencia de Martín del Río, en marcha el próximo mes de septiembre
JORGE ESCUDERO

Las obras de construcción de la residencia para enfermos de alzheimer de Martín del Río -la primera de estas características con que contará la provincia de Teruel- están llegando a su fin. Según el alcalde, Francisco Altaba, queda apenas un mes para que terminen los trabajos, lo que permitirá, a continuación, equipar el centro y ponerlo en funcionamiento el próximo mes de septiembre.


El edificio, con un coste superior a los seis millones de euros, estará dotado de los más innovadores sistemas para garantizar la seguridad de los residentes. Altaba explicó que las instalaciones contarán con detectores conectados a un sistema informático que permitirán a cada cuidador saber en todo momento dónde se encuentra el enfermo que tiene asignado. El alcalde de Martín del Río destacó, además, la ausencia total de barreras arquitectónicas y la gran luminosidad del interior de la construcción, como otras ventajas del centro.


Más de cinco empresas especializadas en el cuidado de enfermos de alzheimer, que operan en distintos puntos de la geografía española, han manifestado ya al Ayuntamiento de Martín del Río su interés por gestionar la futura residencia de esta localidad. Según Altaba, el concurso para la explotación del centro se convocará una vez que esté finalizado el equipamiento interior del edificio.


El Consistorio, promotor del proyecto, recibe también llamadas de familiares de enfermos que muestran su intención de utilizar la residencia. Los cálculos iniciales fijaban en 1.500 euros al mes el coste del centro para los usuarios, si bien Altaba aseguró que esta cifra ha de ser revisada.


Las obras de la residencia se interrumpieron a principios de año durante dos meses por los problemas económicos de la empresa adjudicataria. La ejecución del proyecto fue cedida a una nueva constructora que terminará los trabajos. El centro, con capacidad para 92 enfermos, generará medio centenar de puestos de trabajo en una zona castigada por el paro.