TERUEL

Los abogados denuncian "lentitud y errores" en los asuntos que tramita el tercer Juzgado

Los letrados afirman que el personal carece de formación en materia judicial.La DGA dice que los empleados, llegados en enero, acuden a cursos específicos.

El Juzgado número 3, el día de su apertura a finales de 2009, con los aparatos sin desembalar.
Los abogados denuncian "lentitud y errores" en los asuntos que tramita el tercer Juzgado
ANTONIO GARCíA

El Colegio de Abogados de Teruel ha criticado la "lentitud" con que se tramitan los asuntos en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número tres de la capital. Este tribunal, que se ocupa de los casos de violencia de género además de llevar los de su propia competencia, abrió sus puertas a finales de diciembre del año pasado, después de que todos los estamentos judiciales de la ciudad vinieran reivindicando su funcionamiento desde hacía cinco años.

Según el decano de los abogados turolenses, Manuel Gómez Palmeiro, en el Juzgado número tres "hay una falta de agilidad y también errores". El portavoz de los letrados destacó que, por el contrario, "los empleados son gente muy dispuesta, con mucho interés y muy buena voluntad, y subsanan los fallos enseguida".

Gómez Palmeiro explicó que, ante las quejas reiteradas de los abogados, una representación colegial planteó el problema, hace aproximadamente dos meses, a la titular del Juzgado. Desde entonces, señaló el decano, "la Administración ha tratado de formar a la plantilla adecuadamente". "El personal adolece de una formación específica en Derecho y por eso hay que tener mucha paciencia", agregó.

El Colegio de Abogados pidió, incluso, al Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) que se reforzara la plantilla del Juzgado con nuevos contratados "hasta que el personal consiguiera el rodaje suficiente". Sin embargo, esta medida no se ha adoptado hasta la fecha.

"Imprevisión"

El representante de los trabajadores de los juzgados turolenses por el sindicato CSIF, Antonio Salvador, culpó ayer de "imprevisión" al Gobierno aragonés, de quien dependen los funcionarios. Explicó que la DGA no empezó a dar cursos de formación a los empleados hasta tres meses después de la puesta en marcha del Juzgado.

El sindicalista declaró, además, que los trabajadores carecían de experiencia laboral en juzgados así como de conocimientos sobre el funcionamiento de la Justicia. Y es que, según Salvador, a la hora de contratar a la plantilla, la bolsa de empleados específicos para Justicia estaba agotada. El portavoz de los trabajadores recordó que el Juzgado "ya se abrió de forma caótica, con los ordenadores y los teléfonos sin desembalar, lo que demuestra una total imprevisión y muchas prisas".