Alcañiz busca nuevo gestor para el campin, cerrado por impagos

El objetivo del Ayuntamiento es abrir las instalaciones, a escasos metros de Motorland, en verano.

El Ayuntamiento de Alcañiz busca dar una nueva vida al campin municipal, situado en uno de los enclaves con más potencial del Bajo Aragón, en el paraje medioambiental de La Estanca y a escasos kilómetros de Motorland. El Consistorio ya ha comenzado a redactar las bases para sacar a licitación la gestión de la instalación después de recibir recientemente la autorización del Consejo Consultivo de Aragón para rescindir el anterior contrato por "incumplimiento" del mismo. El objetivo es abrir las instalaciones en verano y que estén listas para la celebración del Gran Premio de Aragón de Moto GP, a finales de septiembre. Mientras tanto, el complejo permanece cerrado.


Se realizará por 15 o 20 años con un canon muy bajo para que con los beneficios el adjudicatario pueda ir pagando las elevadas inversiones que se deben realizar en la instalación, que se encuentra muy deteriorada. La idea inicial era aumentar la cuota del canon actual (3.600 euros anuales) debido a que en los últimos años se ha "revalorizado" la zona al mejorar el paraje con nuevo mobiliario y una campaña de promoción con la marca ‘La Estanca de Alcañiz’. "La situación de las arcas municipales no es mala pero con nuestros ingresos podemos hacer frente a los gastos ordinarios pero no a los extraordinarios salvo que llegue la licencia de las obras del hospital", afirmó el alcalde, Juan Carlos Gracia Suso.


Los problemas con el campin se remontan a años atrás y se acrecentaron a finales de enero, cuando el gestor cerró la instalación, en la que vivían de forma permanente en los bungalows varias personas que ahora se han trasladado a pisos de alquiler de Alcañiz al quedarse también sin luz. Según el dictamen del Consejo Consultivo, al que recurrió el Consistorio para poder cancelar el contrato, en vigencia hasta 2019, al contratista "le será incautada la garantía (18.000 euros) y deberá, además, indemnizar a la administración los daños y perjuicios ocasionados en lo que exceda de la garantía incautada". Se estima que por parte de la adjudicataria desde 2009, Wimpi Spring, se han incumplido una serie de obligaciones esenciales del contrato, como el impago del canon de gestión, de tributos derivados de la explotación, de consumos energéticos o la no aportación de justificantes del pago de las pólizas de seguros. El Consistorio reclama al gestor los cánones por explotación del campin correspondientes a los ejercicios de 2009 a 2015, que ascienden a 81.467,98 euros según un informe de Intervención; la tasa de recogida de basuras de varios ejercicios, el canon de saneamiento y vertido y los consumos energéticos correspondientes al anterior concesionario, 28.578,49 euros.


También existe un informe de un técnico del Ayuntamiento en que se califica de "lamentable" el estado de las instalaciones, lo que se atribuye al concesionario al igual que la adaptación a la normativa de alojamientos turísticos al aire libre. No obstante, reconoce que si hubiera existido algún problema "se debería haber puesto de manifiesto con anterioridad y no en el momento en el que se intenta la resolución del contrato".


El concesionario, Luis Soler, asegura que es el Ayuntamiento quien le debe dinero a él, por lo que reclamará "daños y perjuicios" por todo el proceso y los años que quedan de concesión. "Quien cierra el campin es el Consistorio por su incompetencia y su mala gestión continua", dice el empresario. Según sus cálculos, el Consistorio le adeuda en torno a 1,5 millones al no realizar las inversiones adecuadas en su momento. Reconoce que no paga el canon de 3.500 euros anuales desde 2010, pero por no recibir los cobros municipales, relacionados con las aguas fecales.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión