Los aragoneses continúan esperando más de 60 días para ir a algunos especialistas. Cinco meses después de su entrada en vigor, el decreto que garantiza los tiempos máximos de espera para una consulta de especialidades, en dos meses, y para una prueba diagnóstica, en uno, no se cumple en la mayoría de los casos. Los problemas y las dificultades para la implantación del nuevo sistema informático para coordinar todas las agendas de los profesionales en los diferentes centros sanitarios de la Comunidad están retrasando su aplicación.

El Consejo de Gobierno aprobó esta normativa en junio de 2009 y el Salud anunció su entrada en vigor en octubre de ese mismo año. Este reglamento estipula que un paciente que sea remitido por un médico de Atención Primaria a una "primera consulta" de especialidades tendrá que ser citado en un plazo máximo de dos meses. No obstante, establece que están fuera de este supuesto otro tipo de situaciones. Por ejemplo, cuando un especialista deriva a otro compañero por una consulta complementaria.

Si debido a la saturación no pudieran cumplirse estos tiempos de espera, el Gobierno de Aragón le derivará a otro recurso sanitario dentro de la red del Sistema de Salud de Aragón. En el caso de que tampoco pueda facilitarle esta alternativa, se le ofrecerán consultas o pruebas diagnósticas en otros centros sanitarios concertados. Si a pesar de ello, el enfermo todavía no ha sido atendido, este podrá requerir una consulta en la sanidad privada que tendrá que costear el propio Salud.

Pero durante los cinco meses de puesta en funcionamiento de esta normativa, este compromiso se ha cumplido en contadas ocasiones. De hecho, son cientos los pacientes que todavía esperan meses e incluso hasta un año para ser atendidos por un especialista. La propia página web del Gobierno de Aragón donde se publican mensualmente las listas de espera de consultas de especialidades y pruebas diagnósticas lleva desde agosto de 2009 sin actualizarse. Normalmente, son Traumatología, Oftalmología y Dermatología las que más demora acumulan. Mientras, las colonoscopias o las ecografías son las pruebas que sufren más retraso. Aunque puede variar dependiendo de la demanda.

Por su parte, el grupo parlamentario del Partido Popular hizo el pasado mes de enero una pregunta en las Cortes sobre la aplicación de este nuevo decreto y la propia consejera de Salud y Consumo, Luisa María Noeno, lo reconoció por escrito: "En estos momentos no están disponibles los datos relacionados, dados que actualmente se está ultimando la implantación del nuevo sistema informático y estadístico que, tras la modificación normativa, facilita la correcta gestión de la información a la que se refiere la pregunta".

Precisamente, el diputado del PP Ricardo Canals consideró un "brindis al sol" el anuncio de la consejera de Salud del decreto sobre tiempos máximos de espera. Recordó que desde junio de 2009, cuando el Consejo de Gobierno aprobó la normativa, ha tenido "tiempo suficiente" para la instalación de sistemas informáticos que permitan cumplir con el compromiso adquirido. "Es un flagrante incumplimiento. Nadie le obligó a publicar este decreto. No puede ser que en cinco meses no le haya dado tiempo", criticó.

Consideró que esta situación es una "tomadura de pelo" a miles de aragoneses y la demostración de la "incapacidad" de la consejera de Salud y Consumo de gestionar la sanidad aragonesa. Incluso planteó que gracias a este decreto los aragoneses podrían exigir "un cheque sanitario" para que se les derive a la privada. Además, Canals criticó que el Salud tampoco haya podido cumplir con el decreto sobre procesos quirúrgicos, que garantiza determinadas operaciones en menos de seis meses.