Los antiguos vecinos de Jánovas deberán pagar solo por sus tierras

El presidente de CHE, José Luis Alonso, dice que no se exigirá el pago por las casas, ya que se encuentran en estado de ruina.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), José Luis Alonso, declaró ayer ante los micrófonos de Radio Sobrarbe que los afectados por el proyecto fallido de construir un embalse en Jánovas no deberán pagar precio alguno por sus casas pero sí por sus tierras, algunas ya en cultivo. Alonso aseguró así que en aquel tiempo se pagó "por un inmueble y un solar" pero a causa del estado de ruina en el que se encuentra actualmente el casco urbano de la población, "el pago de una casa no puede ser exigido aunque sí la cantidad correspondiente al terreno", recalcó, recordando que lo que dicta la ley sobre este tipo de procedimientos.


Alonso insistió por otra parte, en que la negociación va a ser satisfactoria para todas las partes dado que la "empresa hidroeléctrica no piensa en hacer negocio con ello". Aun así, manifestó que el proceso va a ser complicado porque "la mayoría de los propietarios han fallecido y en algunos casos es la tercera generación quien reclama por lo que habrá que recomponer el tema de sucesiones".


Alonso reconoció que hasta el momento "el proceso jurídico había sido difícil" pero que el paso dado era "definitivo" para el inicio de la reversión y "será satisfactorio" tanto para los herederos de los antiguos propietarios como la empresa propietaria de los terrenos, siguiendo la legalidad vigente.


"Me quiero reunir pronto con los afectados para facilitarles las cosas y trabajar conjuntamente con ellos", dijo Alonso. También recalcó que las personas que soliciten la reversión deberán ser "legítimos herederos de los antiguos propietarios". y prometió una reunión con ellos después del verano.


Los representantes de la Asociación de Afectados manifestaron, por otra parte, estar más preocupados porque comience cuanto antes el proceso de reversión que por el IPC que se quiere incrementar al precio original de sus propiedades, aunque también desean que "todos los descendientes puedan volver a sus casas sin tener que empeñarse con el banco". Así, Carmelo Muñoz, pidió que a partir de ahora se hable del "anulado proyecto de Jánovas" y que se les de una respuesta justa. La presidenta de la Asociación de Afectados, Milagros Palacio, aludió a los años perdidos por todas las familias afectadas y al retraso en las comunicaciones en el Valle del Ara.


Discrepancias por la N-240


La Asociación de Afectados por el embalse de Jánovas, Lavelilla y Lacort envió también ayer, una carta al presidente de la Comarca de Sobrarbe, Enrique Campo y al alcalde de Fiscal, Manuel Larrosa para solicitar una entrevista con el fin de tratar el anteproyecto de la carretera N-240. Según sus informaciones, el nuevo trazado del firme entre Boltaña y Fiscal pasaría por terrenos de Lacort, Lavelilla y Jánovas y no "consentirían" de nuevo, otra expropiación.


"Todavía no se nos han devuelto nuestras casas y ya se habla de expropiar nuevos terrenos", denunció Carmelo Muñoz. "Estamos a favor de las comunicaciones -añadió- pero pensamos que no es el trazado más adecuado ni tampoco el más económico", aseguró Ramón Salomón, vocal de la Asociación. También nombraron la existencia de zonas consideradas como Lugar de Interés Cultural (LIC) y ZEPA (Zona especial de protección para las aves) por lo que consideran "una contradicción" que la carretera pase por allí.


40 expedientes pendientes


En la actualidad, la Confederación Hidrográfica del Ebro tiene pendiente 40 expedientes de reversión en marcha, a consecuencia de la construcción de los pantanos de Búbal y Lanuza y que se hayan repartidos en la segunda de estas dos localidades (donde se están tramitando 21 de estos expedientes), Saqués (con 17 expedientes en marcha), así como en Hoz y El Pueyo de Jaca (donde existe un expediente de reversión pendiente de tramitación en cada uno de estos núcleos).


En el caso de Lanuza, ya se han tramitado, por otra parte, 107 expedientes de reversión, en un proceso que de alguna forma, podría servir de referente para el caso de Jánovas. "Nunca abonamos un precio simbólico. Nosotros hemos pagado el precio de venta de cuando nos expropiaron nuestras propiedades, más el incremento del IPC de entre 22 y 28 años dependiendo de la parcela", explicó Emilio Pérez, presidente de la agrupación de propietarios de Lanuza. Pérez no considera excesivo, por otra parte, el precio del metro cuadrado -que ahora oscila alrededor de los 300 euros por metro cuadrado- sino "la recuperación de las infraestructuras para el pueblo que tuvimos que hacer después".


Una evaluación de las futuras necesidades básicas -electricidad, agua corriente; etc- de Jánovas, Lavelilla y Lacort es precisamente el motivo del estudio que está llevando la Fundación Ecología y Desarrollo a instancias del Ayuntamiento de Fiscal. "Vamos a ser muy duros a la hora de reclamar todos esas necesidades; tenemos muy claro que la reversión tiene que venir acompañada por todos esos servicios", comentó el alcalde, Manuel Larrosa. "Desde el Ayuntamiento esperamos que se nos ayude desde las instituciones con un plan de restitución -aseguró Larrosa- que pueda ser consensuado por todos los implicados".