Los alumnos tendrán clases de refuerzo si el virus afecta al desarrollo del curso

Tranquilidad, higiene y buenos alimentos son los ingredientes de la receta que la DGA dio ayer a las familias para prevenir el contagio de la gripe A en los centros escolares. Los responsables de los departamentos de Salud y Eduación se reunieron ayer con las asociaciones de padres de alumnos para detallarles las medidas que se tomarán en los colegios y que se centran en extremar la limpieza de las instalaciones y los materiales y en concienciar a los pequeños de que deben lavarse las manos varias veces al día, sobre todo después del recreo, antes de comer y al salir del colegio. Esto deberá acompañarse de una dieta equilibrada y rica en vitamina C que deberán seguir los niños en casa y que sus familias han pedido que se extienda a los menús de los comedores escolares.

Dentro del plan de actuación no se contempla -salvo en casos extraordinarios- la opción de cerrar aulas o colegios enteros para evitar contagios y se recomienda a los padres que actúen como ante cualquier otra enfermedad contagiosa, es decir, usando el sentido común. Si el niño se encuentra mal, debe acudir al médico y si está enfermo, se aconseja que permanezca en su domicilio hasta 24 horas después de desaparecer los síntomas. Esto ocasionará absentismo escolar. En el caso de que se produjera una situación especial en la que el virus trastocara el desarrollo normal de las clases o la enfermedad obligara a muchos menores a perder clase durante largos periodos, el servicio de Inspección de Educación se asegurará de que los pequeños reciban apoyo para ponerse al día. Se contará también con personal suficiente para poder cubrir las bajas de profesores.

Ante todo, calma

Las asociaciones de padres de alumnos se mostraron ayer satisfechas y tranquilas tras la reunión mantenida con los representantes de la DGA. "Vamos a transmitir a las familias lo que nos ha dicho Salud, que, aunque la gripe A es más contagiosa que la común, hasta ahora tiene un nivel de virulencia inferior. Hay que mantener la calma", comentó Ana Abán, presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Aragón (Fapar). "Nos han dejado muy tranquilos y esa es la sensación que trasladaremos al resto de familias. Hay que aplicar sentido común como ante cualquier otra enfermedad y, sobre todo, seguir las recomendaciones de extremar la higiene", añadió Pedro Martínez, presidente de la Federación Cristiana de Madres y Padres de Alumnos de Aragón (Fecapa).

Abán y Martínez coincidieron en que debían adoptarse medidas que trastocaran lo menos posible el curso escolar, por lo que se mostraron de acuerdo con que el inicio de las clases no se retrase.

Además de con las familias, las consejeras de Salud, Luisa Noeno, y de Educación, Mª Victoria Broto, mantuvieron ayer un encuentro para coordinar las actuaciones que se llevarán acabo a partir de la semana que viene, cuando comienza el curso (el 8 en Infantil y Primaria y el 10 en Secundaria).

Los profesores piden protección

Los profesores comparten la opinión de que hay que extremar la higiene y exigen que se dote a los centros de gel desinfectante, rollos de papel secamanos, pañuelos desechables y mascarillas sanitarias para casos de emergencia. No obstante, discrepan con la Administración sobre la necesidad de cerrar los centros si hay varios infectados. "Debería clausurarse un aula si hay más de tres alumnos contagiados y el colegio si hay más de tres aulas con niños enfermos", afirmaron ayer desde el sindicato CSI-F. Piden, además, que si se detecta el virus en un centro, se proteja a los docentes que pertenezcan a algún grupo de riesgo.

Por su parte, en STEA insistieron en que se debe elaborar un protocolo de actuación para que los equipos directivos y los tutores puedan responder de inmediato en casos puntuales de gripe, así como tener prevista la apertura de listas en aquellas especialidades que puedan quedar sin candidatos a interinidad.