TEMPORAL

Las tormentas remiten hoy tras dejar hasta 100 litros en el Pirineo y 35 en Cinco Villas

Ayer llovió y granizó en amplias zonas de Aragón. A lo largo de la pasada noche se esperaban nuevos chubascos.

Paseantes y turistas se refugian de una tormenta en la entrada a la basílica del Pilar.
Las tormentas remiten hoy tras dejar hasta 100 litros en el Pirineo y 35 en Cinco Villas
JOSé MIGUEL MARCO

El episodio de fuertes chubascos y tormentas que está afectando a Aragón en las últimas horas remitirá a lo largo de la mañana de hoy tras haber dejado más de 100 litros por metro cuadrado (l/m2) en algunas zonas del Pirineo oscense y hasta 35 l/m2 en las Cinco Villas. Ayer llovió e incluso granizó en amplias zonas de la Comunidad, y además a lo largo de la pasada noche se esperaban nuevas precipitaciones, por lo que es muy probable que la cantidad total de agua caída haya sido todavía mayor.


La provincia de Huesca ha seguido en alerta por lluvias y tormentas hasta las 7.00 de hoy. A esa hora, el aviso se ha reducido a la prealerta, nivel que seguirá vigente hasta el mediodía. En el resto de Aragón, todos los avisos se han levantado a las 8.00.


En cuanto a las temperaturas, la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) indica que hoy las máximas volverán a descender ligeramente, pero seguirán por encima de los 30 grados en gran parte de Aragón.

Según los pluviómetros del sistema automático de información hidrológica (SAIH) de la Confederación, las comarcas del Pirineo en las que más precipitaciones se recogieron ayer fueron el Sobrarbe y el Alto Gállego, donde hubo valles en los que cayeron entre 50 y 100 l/m2 . En algunas zonas de la Ribagorza se midieron más de 40 l/m2, mientras que la Jacetania apenas pasó de los 15 l/m2.


90 litros en solo una hora

La mayor pluviometría correspondió al observatorio de Yésero con 112 l/m2 hasta las 22.00, una cifra que aún resulta aún más llamativa si se tiene en cuenta que 90 de esos litros cayeron en apenas 60 minutos –entre las 17.30 y las 18.30– y que la Aemet activa las alertas cuando se esperan chubascos que puedan dejar 30 litros en una hora –justo la tercera parte de lo que se recogió en ese punto del Alto Gállego–. Afortunadamente, esa enorme tromba de agua no afectó a zonas habitadas.


En Torla se midieron 63 l/m2; en el embalse de Búbal, 54 l/m2; en Betés (Biescas), 36 l/m2; y en el pantano de Lanuza, 33 l/m2. Más al este, el pluviómetro que la CHE tiene en Lafortunada llegó a los 27 l/m2, y en el de Chía se alcanzaron los 42 l/m2.


Las precipitaciones caídas en el resto de Aragón, aunque generalizadas, fueron mucho menos abundantes. Solo dejaron más de 10 l/m2 en el entorno de Alcañiz, en la ribera del Ebro aguas arriba de Zaragoza y en las Cinco Villas. Los registros más altos correspondieron a Tauste, con 36 l/m2, y a Gallur, que rozó los 20 l/m2.


Granizo sin daños

En muchas de esas zonas las tormentas fueron acompañadas de granizo, aunque todo apunta a que no se produjeron daños para la agricultura. Según el radar que el Laboratorio de Física de la Atmósfera que la Universidad de León tiene en Zaragoza, el pedrisco de mayor tamaño cayó en Bulbuente y en Capella, pero no superó el tamaño de una nuez.

Otras localidades como Magallón, Borja, Novillas, El Frago, Orés, Pradilla, Castejón de Valdejasa, Lascuarre o la propia Zaragoza capital también tuvieron granizo, pero su tamaño fue similar al de un garbanzo o una avellana.


Todos estos chubascos contribuyeron a aliviar el calor que hizo ayer, ya que en gran parte de la Comunidad se volvieron a superar ampliamente los 30 grados. La máxima se midió en Quinto, que con 34,9 tuvo el cuarto registro más alto de todo el país. El aeropuerto de Zaragoza se quedó a solo una décima con 34,8.