AGUA

Las lluvias agrietan el consenso del tripartito catalán por la tubería a Barcelona

ICV pide la derogación del decreto que permite la prolongación del denominado minitrasvase del Ebro hasta Barcelona si se dan las garantías de abastecimiento, mientras PSC y ERC defienden seguir adelante.

Las persistentes lluvias de las últimas semanas y la consecuente subida de las reservas de los embalses catalanes han terminado por devolver la disensión al tripartito catalán. En la víspera de que el Gobierno de Aragón acuerde recurrir al Tribunal Constitucional para derogar el minitrasvase a Barcelona alegando que ya no es tal la emergencia por sequía, ICV pidió no llevarlo a cabo si se garantiza un caudal mínimo para el suministro al área metropolitana antes de iniciarse las obras. ERC, sin embargo, calificó de "precipitada" esta consideración, mientras el PSC interpretó las palabras de sus socios ecosocialistas para negar que se haya pedido la retirada del minitravase.


A finales de marzo, los embalses catalanes se encontraban al 19,6%. Dos meses después, las últimas lluvias han duplicado, hasta el 39,39%, la capacidad de estos pantanos, según datos de la Agencia Catalana del Agua (ACA). No obstante, los 273,52 hectómetros cúbicos actuales aún son inferiores del 56,48% de la capacidad registrado hace un año.


Amparándose en estas cifras, el secretario general de ICV, Jordi Guillot, pidió que no se construya la tubería de la polémica si se garantiza el suministro de agua y existe "riesgo cero". "Si se cumpliesen las condiciones antes de que comiencen las obras de la tubería que tiene que llevar agua desde el Ebro, pediríamos que no se realizase porque ya no estaría justificada", aseguró, en rueda de prensa. El ecosocialista pidió, por tanto, que se determinen los caudales y las condiciones mínimas para que su formación pueda pedir la derogación del decreto "con todas sus consecuencias" si se dan las condiciones básicas.


Posteriormente, el PSC habló en boca de su secretario de Organización, José Zaragoza, para puntualizar que su socio "no cuestiona el decreto", sino que tan sólo manifiesta en público su contenido. El dirigente socialista aclaró que la Generalitat de Cataluña "demuestra su coherencia afrontando un problema para los ciudadanos de Cataluña" y añadió que persiste "la situación de emergencia".


Asimismo, la portavoz de ERC, Marian Llansana, ve la propuesta de ICV "precipitada", entendiendo que esta decisión debería partir de una "evolución técnica en profundidad de la ACA" y no de una "evaluación política". En caso de que los informes así lo acreditasen, sí llegaría el momento de analizar "si se podría prescindir del minitrasvase del Ebro" y aprovechar "medidas adicionales", tales como barcos de agua, reutilización del líquido o incremento del ahorro.


Por su lado, el alcalde de Barcelona, el socialista Jordi Hereu, pidió que el proyecto de alargar el minitrasvase tire adelante, pese a las últimas lluvias. Tras inaugurar el IES Escuela de Hotelería y Turismo de Barcelona, Hereu celebró las últimas precipitaciones, pero pidió no alterar los planes de abastecimiento al subrayar que "que haya más oferta y que mantengamos la seriedad en las políticas de ahorro es la garantía de que ni Barcelona ni tres cuartas partes de Catalunya entren en estado de emergencia severa".


En cualquier caso, el PP ya ha mostrado su disposición a hacer frente común con los socialistas y apoyar el minitrasvase en caso de que no cuente con el apoyo de los otros partidos. Así lo declaró el presidente de los populares en Cataluña, Daniel Sierer, que instó al Gobierno de José Montilla a "no tener miedo de sus socios", apuntando que el PP está "dispuesto a dar su apoyo a cualquier iniciativa que suponga el progreso y el bienestar de los catalanes".