EN FRANCIA

La Guardia Civil interrumpe la búsqueda de Publio Cordón en el Mont Ventoux

La familia confía en que continúen los rastreos con una máquina para suelos más duros.

Imagen de archivo de una búsqueda anterior de la Guardia Civil en el Mont Ventoux.
La Guardia Civil interrumpe la búsqueda de Publio Cordón en el Mont Ventoux
Le Dauphine Libere

La Guardia Civil y la Policía francesa, que desde hace un año buscan en las faldas del Mont Ventoux, en la Provenza francesa, los restos de Publio Cordón, secuestrado por los GRAPO en junio de 1995, interrumpieron sus labores el pasado viernes. Según informó la prensa gala, ese día se informó al alcalde de la localidad vecina de Bedoain que las tareas de búsqueda de paralizaban y que la excavadora que se ha utilizado a lo largo de estos meses se empleará ahora para devolver el terreno a su estado habitual.

 

Por el momento se ignora si el cese de las labores obedece a la llegada de las nieves y el mal tiempo en la zona o porque se piensan dirigir en otra dirección.

 

De hecho, Pilar Muro, esposa del empresario secuestrado y asesinado con toda probabilidad por los GRAPO, aseguró ayer que la Guardia Civil le había dicho la semana pasada que estaban a la espera de conseguir una maquinaria especial para trabajar en terrenos más duros y continuar buscando.

 

A lo largo de este año y en varias fases, sobre todo dependiendo de las condiciones meteorológicas, los agentes han removido toneladas de tierra que antes habían dividido en parcelas, en busca de los restos del empresario.

 

El juez Fernando Grande Marlaska ordenó hace un año la búsqueda de los restos del empresario poco después de que el terrorista Fernando Silva Sande, expulsado de los GRAPO, confesara que Publio Cordón murió mientras permanecía en poder del comando que le retenía y nunca había sido puesto en libertad. A esta declaración -que no hacía sino confirmar lo que su familia se temía desde que pagó el rescate y no fue liberado- se sumaba la explicación de dónde estaba el cadáver. Según Silva, tras caer por una ventana al querer escapar y morir en el intento, él mismo trasladó su cuerpo en un coche desde Lyon y lo enterró en las faldas del Mont Ventoux.

 

A pesar de esta confesión y de que el terrorista ha sido sacado de la prisión y llevado a la zona para reconocer el terreno, el cambio de la orografía del mismo con el paso del tiempo ha dificultado mucho las tareas de los guardias civiles y de los policías franceses. Además de una excavadora, los agentes han contado con un equipo de localización más preciso y sofisticado que un detector de metales incorporaron a la búsqueda, al saber que junto que habían utilizado, al saber que junto al cadáver de la víctima, el terrorista dejó sepultadas varias herramientas de metal. Aún así, parece que la búsqueda no ha dado resultados o, por lo menos, no han trascendido. La familia confía en que se siga trabajando hasta que haya resultados.