La Generalitat admite que el Museo de Lérida todavía no está reconocido oficialmente

La Asociación de Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés (Apudepa) hizo público ayer que ha tenido acceso a un documento del Servicio de Museos y Protección de Bienes Muebles de la Generalitat de Cataluña en el que se certifica que el Museo Diocesano y Comarcal de Lérida no figura en el Registro de Museos de Cataluña. Según la entidad aragonesa, ese escrito demuestra que la institución que alberga en depósito los 113 bienes religiosos propiedad del Obispado de Barbastro-Monzón "no posee el pleno reconocimiento legal que le permitiría ampararse en la legislación catalana" para no devolverlos a sus legítimos dueños.

En ese mismo documento, el Ejecutivo catalán "elude confirmar si existe catalogación del conjunto de bienes aragoneses como 'colección", algo que para Apudepa hace "sospechar" que tampoco la catalogación de las obras es firme.

Según la asociación, esto confirma que el expediente iniciado en 1995 para inscribir el Museo de Lérida en el el Registro fue cancelado en 1996. "La resolución de la consejera Mieras que ha impedido hasta ahora el traslado de los bienes a Aragón apela al principio de unidad de colección del Museo Diocesano y Comarcal de Lérida -recuerda Apudepa-. Sin embargo, y paradójicamente, ese Museo no está registrado, lo que supone un motivo más para considerar dicha resolución nula de pleno derecho".

La Asociación de Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés refuerza sus razonamientos con otro dato. Siempre según Apudepa, ante esos hechos "gravísimos" la Generalitat está procediendo actualmente a la "normalización legal" del Museo de Lérida. Con fecha 1 de febrero, una resolución de su director general de Patrimonio Cultural ha incoado expediente para la inscripción definitiva de las instalaciones leridanas en el Registro de Museos de Cataluña.

Personarse en el proceso

El comunicado difundido ayer por Apudepa considera que el Gobierno de Aragón y el Obispado de Barbastro-Monzón, como partes interesadas en el litigio, están "obligados" a personarse "de inmediato" en el proceso para alegar y dejar constancia de que parte de los bienes depositados en el Museo de Lérida son propiedad de las parroquias del Aragón oriental, por lo que pueden verse afectados por el proceso.

"Es absolutamente necesario paralizar el expediente que tramita la Generalitat o aclarar que los bienes aragoneses allí depositados no forman parte del Museo que ahora se pretende registrar", insistió Apudepa al tiempo que recordaba que la DGA tiene paralizada la declaración como bienes inventariados de las obras.