EL FUTURO DE FIGUERUELAS

La DGA sigue sin un plan de choque para el automóvil ante la venta de Opel

El consejero de Economía, Alberto Larraz, insiste en la unidad política para que "los recortes en Figueruelas sean asumibles".

El futuro de la factoría de General Motors en Figueruelas volvío a ser uno de los asuntos principales en el pleno celebrado ayer en las Cortes de Aragón, por encima de la relegada Travesía Central del Pirineo.

 

Ante la ausencia de Iglesias, que casualmente se encontraba junto al ministro de Obras Públicas, José Blanco, en un acto sindical, el portavoz parlamentario del PP, Eloy Suárez, criticó la actitud y la gestión del Gobierno aragonés en la crisis de GM y en el proceso de venta.

 

Suárez, al igual que Chesús Yuste (CHA) y Adolfo Barrrena (IU) reclamaron un plan de choque para hacer frente a la crisis. Pero, de nuevo, el Gobierno de Aragón -esta vez a través del consejero de Economía y Hacienda, Alberto Larraz- no presentó ningún plan para el futuro más inmediato. Sí avanzó Larraz que existe un plan de globalización de la Unión Europea para recolocaciones que se ha utilizado en Tarazona y al que podría recurrirse en el caso de Opel. Pero no dijo nada más. Se limitó a explicar el proceso de negociación que se ha llevado a cabo (reuniones con otros países, con sindicatos, empresa...) y a advertir de que el futuro de Opel no puede pasar por traspasar producción de una planta más eficiente a otra que sea menos. También apostó por mantener los tres modelos que se producen en Figueruelas, el Corsa, el Meriva y el Combo. E insistió en que todavía estamos en una fase en la que no se conocen todos los datos.

 

Sin embargo, sus explicaciones no convencieron a la oposición, especialmente al PP, quien había solicitado la comparecencia del presidente de Aragón, Marcelino Iglesias. Suárez se encargó de recordarle la importancia de Opel y "lo que arrastra": supone el 5% del PIB de Aragón y el 25% de la producción industrial. Le reprochó que el Gobierno autonómico no haya sabido transmitirle al presidente Zapatero la importancia de Opel para la Comunidad y le interrogó una y otra vez por el plan. "Vamos a actuar con responsabilidad pero les vamos a exigir responsabilidad", apostilló el portavoz del PP.

 

El diputado de CHA Chesús Yuste preguntó qué va a pasar ahora tras el triunfo de Merkel en Alemania y le recriminó que Zapatero e Iglesias "están en otro sistio mientras la mano está en Berlín".

 

Por su parte, el portavoz de IU, Adolfo Barrena, pidió -en un tono menos duro y más conciliador- que no se utilice la Opel "como arma política". "En este tema o jugamos todos con la misma baraja o al final nos acabaremos haciendo trampas todos", dijo. "Es el momento de tomar decisiones", instó. Coincidió con los mensajes lanzados desde la bancada de PSOE y PAR, partidos que sustentan el gobierno en la DGA. Tanto el socialista Antonio Piazuelo como la aragonesista Ana de Salas reclamaron consenso. (Más información en página 33)