Las cuatro comarcas del Pirineo aragonés serán las más afectadas del Alto Aragón si el reglamento de transporte aprobado por Educación se pone en marcha. El hecho de que se queden fuera los pueblos que distan menos de cuatro kilómetros del colegio o aquellas rutas en las que hay menos de seis alumnos preocupa a alcaldes y padres. Aunque Educación asegura que solo se están estudiando los casos, Fapar insiste en que es "preocupante" que se deje a discreción del director provincial quién se salva. "¿Qué pasará el próximo curso?", se preguntan.

Cuatro de las 27 rutas de Jacetania, ocho pueblos en el Alto Gállego (suman 28 escolares), 9 poblaciones en Sobrarbe son los datos contabilizados por estos territorios. Aunque Ribagorza no dio una cifra exacta, su presidente José Franch calculó que serán unos 15 pueblos. La medida afectaría a rutas que se dirigen a Benasque y Castejón de Sos, de la zona del Turbón a Campo y también cercanas a Graus o Arén. Confió en que la excepción llegue para todas, como ya han pedido a Educación, pero criticó que sea una persona quien decida si hay o no autobús cuando debería ser un servicio obligatorio. "Es de sentido común mantenerlos", apostilló el político. "Sin servicios como este es imposible vivir en las zonas rurales", concluyó.

Pero la amenaza ya está ahí, en forma de resolución y es la dirección provincial quien decide. En estos cuatro territorios, que son las propias comarcas quienes gestionan el transporte, ya se han realizado varias reuniones para abordar el tema. En el resto, que lo lleva la dirección provincial, también se han hecho algunas llamadas. Además de los niños de Santa Eulalia, Triste, la Peña, Riglos y Murillo (piden a los padres que acerquen a los menores hasta la carretera general) también se ha tanteado a los de Casbas, Castejón de Arbaniés, Alcalá de Gurrea y Montmesa.

La Federación de Asociaciones de Padres (Fapar) insiste en que es "preocupante". El representante en Huesca, Andrés Cadenas, teme que, al igual que el pasado año hizo con la ESO en zonas rurales, Educación salve este año todas las rutas y el año que viene las quite. Además, criticó, que hayan hecho pública la medida a final de curso "sin posibilidad de rearme para que los padres no protesten".