La Diputación de Huesca adquiere la Cartuja de las Fuentes para su conservación

Se trata de un monumento protegido desde 2002 como Bien de Interés Cultural.

Cartuja de Nuestra Señora de Las Fuentes
La Diputación de Huesca adquiere la Cartuja de las Fuentes para su conservación
Heraldo.es

La Diputación de Huesca (DPH) ha acordado adquirir la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes, un monumento protegido desde 2002 como Bien de Interés Cultural, a fin de hacer frente al progresivo estado de deterioro del edificio y de garantizar su preservación.


La decisión de adquirir el edificio por 261.945 euros ha contado con el visto bueno de la comisión de Régimen Interior y Bienestar Social de la Corporación altoaragonesa y deberá ser ratificado en la próxima sesión plenaria de la institución, según informa la DPH en un comunicado.


Según el presidente de la Diputación de Huesca, Antonio Cosculluela, que mantuvo en pasadas fechas varias reuniones previas con los propietarios y colectivos en defensa del patrimonio, la compra es "un acto de responsabilidad" destinado a preservar el patrimonio de la provincia altoaragonesa.


Para Cosculluela, esta adquisición, avalada por informes jurídicos y técnicos encargados por la propia institución, debería haber sido llevada a cabo por el Gobierno aragonés, al ostentar la administración regional las competencias en materia de protección del patrimonio.


El responsable institucional ha reiterado su ofrecimiento al Ejecutivo regional de "colaborar" en el proceso de salvaguarda de la Cartuja de las Fuentes.


Según ha explicado, la Diputación de Huesca "ha actuado" tras denegar el Gobierno aragonés "todas las propuestas" hechas por los propietarios del inmueble y los colectivos en defensa del patrimonio para salvaguardar el monumento.


Las fuentes citadas aseguran que, a expensas de que la operación de compraventa pueda ser objeto de un derecho de tanteo por parte del Ejecutivo regional en los próximos dos meses, las primeras actuaciones previstas tienen como objetivo prioritario la consolidación de las cubiertas del edificio y la mejora del capitel de la torre del campanario.


Cosculluela se ha mostrado convencido de las "posibilidades inmensas" de que la Cartuja se convierta en un "atractivo turístico" de interés para la provincia al albergar uno de los conjuntos pictóricos "más importantes" de Aragón, obra de Francisco Bayeu.


Desde la DPH se asegura que los propietarios del edificio se pusieron en contacto con la institución ante el "desinterés" del Gobierno aragonés ante una propuesta de venta que tenía como objetivo que el monumento quedase en manos de una administración pública interesada en evitar su deterioro.


La Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes fue catalogada en 2002 como Bien de Interés Cultural (BIC), iniciativa que llevó a los propietarios a valorar la posibilidad de vender el monumento a una institución pública, afirman las fuentes citadas.


Los monjes cartujanos que residieron en el cenobio fue la primera fundación de esta orden impulsada por los condes de Sástago a principios del siglo XVI, aunque el monasterio fue comenzado a erigir a lo largo del XVIII.


Debido a su antigüedad, es uno de los elementos más importantes de la arquitectura de la ilustración en Aragón, también por las pinturas murales de Bayeu, cuñado de Goya, que decoran más de 2.000 metros cuadrados de su interior.


Francisco Bayeu ingresó en la Cartuja de las Fuentes como novicio en 1760 y permaneció en ella a lo largo de toda su vida, decorando techos, bóvedas y capillas del inmueble con frescos de motivos religiosos.