El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Xavier de Pedro, ha dicho este lunes que ya han concluido las obras de reparación de los daños ocasionados por las avenidas de este año en el cauce del río Aragón en Castiello de Jaca, Villanúa y Canfranc (Huesca) tras una inversión de 1,5 millones de euros.

De Pedro ha visitado este lunes la zona y allí ha explicado, según fuentes del organismo de cuenca, que se han ejecutado ya las actuaciones para la reparación de márgenes en el río Aragón necesarias para recuperar, en lo posible, la situación del cauce anterior a las avenidas de octubre.

Concretamente, en Castiello de Jaca se ha actuado tanto en el tramo urbano como aguas arriba, para mejorar la capacidad de desagüe del río en ambas zonas, y también se ha reparado la escollera de la margen derecha, situada aguas arriba, prolongándola por delante de la urbanización que se vio más afectada por la riada.

Así, en caso de un evento similar, además de ganar en capacidad de desagüe se protege de la erosión la margen sobre la que se asientan las edificaciones.

En Villanúa se ha actuado en varios puntos, restituyendo la línea de la margen y reparando escolleras en la zona del puente nuevo, del paseo del parque y del centro cívico, entre otras.

Mientras que en Canfranc se ha repuesto la línea de la margen derecha colindante con la nave de La Comarca y se han reparado las escolleras de defensa que sufrieron daños en un tramo urbano de Canfranc Pueblo y en la margen izquierda en la zona de la depuradora en Canfranc Estación.

Tras estas actuaciones principales, la CHE va a llevar a cabo trabajos de limpieza y retirada de tapones aguas arriba de Castiello y aguas abajo, hasta Jaca y Puente la Reina.

También se actuará en Navarra, en afluentes de la cuenca del Aragón que sufrieron también desperfectos, como el Salazar y el Esca.

El importe de estas actuaciones en el río Aragón asciende a 600.000 euros (400.000 euros en la provincia de Huesca y 200.000 en la de Navarra) y forman parte de las partidas habilitadas por el Ministerio de Medio Ambiente a la CHE para paliar los efectos de las crecidas y avenidas registradas durante el actual año hidrológico en la cuenca del Ebro.