Cerler amplía 7 kilómetros más y el resto de estaciones resisten a la espera de la nieve
También se mantienen abiertos los espacios nórdicos de Llanos del Hospital y Balneario de Panticosa.
Las estaciones de esquí del Pirineo afrontan una de las semanas clave de las vacaciones navideñas con cerca de 60 kilómetros gracias a las nuevas pistas que va a poder abrir a partir de este martes Aramón-Cerler. A ellos se suman los 9,5 km que ofrecen los espacios nórdicos de Llanos del Hospital de Benasque y Balneario de Panticosa y los 6,7 km de las dos estaciones de Teruel.
El día de Navidad siempre supone un paréntesis y, de hecho, el dominio conjunto Astún-Candanchú no abrió mientras que los centros del grupo Aramón lo hicieron con un horario reducido, de 9.00 a 14.00, para permitir a los clientes compatibilizar el disfrute del deporte blanco con las reuniones familiares típicas del 25 de diciembre.
Los usuarios de Cerler tendrán un ‘regalo’ de Papá Noel ya que el sector Cota 2000 estrenará este martes temporada, ampliando así el número de kilómetros de 3 a 10 en la estación del valle de Benasque. Ello conllevará la apertura de cinco nuevas pistas y otros cinco remontes más. Los espesores tanto allí como en el sector Ampriu se sitúan entre los 30 y los 40 centímetros de nieve polvo-dura. Un autobús gratuito comunicará ambos accesos
El resto de estaciones resisten con los mismos dominios esquiables de momento a la espera de que lleguen nuevas nevadas o puedan producir con los cañones. Así, Formigal cuenta con 21 kilómetros, 11 remontes y 15 pistas con espesores de 20 a 45 cm. Por ahora, sigue sin poder abrir al público el sector de Panticosa, aunque al menos sí ha abierto este martes la telecabina para uso turístico (de 9.00 a 16.00).
Por su parte, el dominio Astún-Candanchú ofrece a sus clientes un total de 26 kilómetros. De ellos, la gran mayoría pertenecen a Astún (22,5), donde los espesores oscilan entre los 25 y los 35 cm. Por ahora, se conforman con "mantener lo que hay" a la espera de nuevas precipitaciones, indicaron desde el centro invernal.
Mientras, en Candanchú por ahora no se marcan más objetivo que mantener abierta la zona de la Tuca en Cota 2000 con 3,5 km. Sus espesores van de 20 a 40 cm. "Esperamos que la noche de fin de año traiga temperaturas bajas y nuevas nevadas que permitan activar los cañones de nieve y así ampliar el dominio esquiable de cara al nuevo año", indicaron.
Y es que las previsiones meteorológicas descartan que llegue la nieve al Pirineo oscense al menos hasta el fin de semana, de manera débil y, preferentemente, en la zona occidental. Además, las temperaturas tampoco son demasiado frías ya que este lunes, por ejemplo, llegaron a los 9,5 grados en Cerler-Cogulla y a 8,4 en Formigal-Sarrios, según la Aemet.
