Villanúa modernizará sus 1.065 farolas para convertirse en destino ‘starligth’
El Ayuntamiento comienza esta semana la renovación de su alumbrado, que le permitirá ahorrar unos 90.000 euros al año. También va a recortar la factura del albergue con otra inversión de 263.000 euros en eficiencia energética.
Villanúa, uno de los principales destinos turísticos del Pirineo aragonés, aspira a atraer visitantes también por la calidad de su cielo y su baja contaminación lumínica, uniéndose a la privilegiada lista de territorios ‘starlight’. Un certificado que en Aragón solo tienen las Cuencas Mineras, Gúdar-Javalambre, el Aranda y la Sierra de Albarracín.
Y con ese objetivo van a emprender un ambicioso proyecto para modernizar sus 1.065 farolas que tendrá un coste de 857.000 euros, subvencionado en un 85% con fondos europeos a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE). La empresa Enrique Coca comenzará esta misma semana las labores de sustitución de las luminarias ubicadas en el casco urbano y en varias urbanizaciones, que deberán estar acabadas en siete meses.
Esta inversión no solo será estética sino que permitirá ahorrar 90.000 euros anuales en la factura de la luz ya que el nuevo alumbrado público tendrá una tecnología LED más eficiente disminuyendo la potencia de consumo de 99,69 kW a 32,81 kW, y consiguiendo un ahorro energético del 73 %.
El nuevo sistema incluirá telegestión centralizada que permitirá regular las farolas en función de los diferentes horarios nocturnos y tipos de vías. También se dotará al alumbrado del mismo tono e intensidad lumínica en todas sus calles y barrios. Y todo ello garantizando las condiciones de visibilidad de los conductores y peatones, y reduciendo la luz intrusa o molesta para los hogares, al mismo tiempo que se logra un ambiente visual nocturno agradable.
"Se han hecho urbanizaciones en tantas fases que tenemos farolas de todo tipo de noche y esto parece una discoteca. Y ahora vamos a unificarlas todas y vamos a cambiar la fisonomía de pueblo para intentar ser un destino ‘starlight’ y que nuestro cielos sea un aliciente turístico más", destaca el alcalde, Luis Terrén.
Junto a esta actuación, el Ayuntamiento también va a recortar de forma drástica el consumo energético del albergue municipal. Acaba de sacar a licitación por 263.000 euros -subvencionados en más de un 80% por una ayuda del Ministerio de Transportes– las obras para renovar toda la carpintería exterior (sustituyendo los marcos de madera por PVC y vidrios de altas prestaciones térmicas) y cambiar la caldera de gasóleo por un sistema de aerotermia.
Será la primera gran reforma que se empresa en este edificio desde su inauguración en el año 1965. Está gestionado por una empresa privada y tiene un altísimo nivel de ocupación en primavera con cursos de inglés, en verano con campus deportivos y en invierno con la campaña de esquí.
En 2021, los servicios municipales emitieron 183,56 toneladas de CO2 equivalente, siete menos que en 2019. Y su objetivo es reducir en un 10% los gases de efecto invernadero en este 2023.
