El tirón del turismo de lujo en el Pirineo impulsa un exclusivo complejo de cabañas en Escarrilla
El empresario Ángel Lameca espera inaugurar el próximo verano este nuevo concepto de aparthotel solo para público adulto.
El Pirineo aragonés cuenta con ofertas de alojamiento turístico para todos los bolsillos, desde cámpines y refugios muy asequibles a hoteles de hasta 600 euros la noche en temporada alta. Este último segmento de visitantes está creciendo cada vez más y a ellos se dirige especialmente el nuevo proyecto de Ángel Lamenca, un empresario hostelero con 35 años de experiencia que impulsa un exclusivo aparthotel de cabañas de lujo en Escarrilla, localidad perteneciente a Sallent de Gállego.
El complejo, que acaba de ser sometido al procedimiento de evaluación de impacto ambiental por parte del Inaga, estará compuesto por ocho cabañas de ‘estilo austriaco’ construidas con madera, pizarra y piedra en una parcela colindante con el casco urbano y con unas espectaculares vistas panorámicas hacia la cercana estación de esquí de Panticosa. En total, ocuparán un terreno de 2.100 metros cuadrados.
Siete de estas casas tendrán unos 40 metros cuadrados de superficie útil cada una y una capacidad de dos personas. Dispondrán de salón-comedor-cocina, un aseo, un dormitorio con jacuzzi y una terraza, además de una plaza de aparcamiento propia y una zona ajardinada de unos 20 metros cuadrados.
Mientras, la octava cabaña, que será algo más pequeña, tendrá un espacio común con baños y una terraza. Y todo ello se completará con una piscina climatizada de 15 metros cuadrados.
La construcción seguirá los criterios ‘passivhaus’ de alta eficiencia energética ya que el consumo de agua caliente y la calefacción por suelo radiante de agua se obtendrán mediante aerotermia.
El proyecto prevé la creación de tres puestos de trabajo estables y la contratación de al menos dos personas más durante el verano para las labores de mantenimiento y limpieza.
Si logra todos los permisos necesarios, el promotor espera poder iniciar la construcción este otoño y que se pueda inaugurar el complejo el próximo verano.
"Va a ser un lugar muy privado"
"Va a ser un lugar muy privado y de lujo porque es lo que busca ahora un tipo de cliente que viene al Pirineo", subraya Ángel Lamenca, que regenta en Escarrilla un hotel de una estrella con 28 habitaciones y restaurante dirigido a un público totalmente distinto. De hecho, las casas de este aparthotel no tendrán ventanas laterales y los jardines estarán separados por una barrera vegetal para que los huéspedes no se puedan ver entre sí.
Su idea es ofrecer todas las comodidades posibles durante su estancia. En principio solo servirán el desayuno "a la hora que quieran los clientes", pero para el resto de comidas y cenas les facilitarán reservas en establecimientos del valle. "Y les podremos llevar también así que si quieren, no tendrán por qué coger ni el coche», subraya. En invierno, por ejemplo, les ofrecerán la posibilidad de gestionares los forfaits para ir a esquiar y otro tipo de actividades exclusivas.
Ángel Lamenca también deja claro que las cabañas están enfocadas exclusivamente al público adulto, por lo que no se contempla la estancia de menores. "Queremos que sea el lugar ideal para parejas que les apetezca estar unos días en el Pirineo sin que les moleste nadie", remarca.
La memoria del proyecto concluye que es técnica viable porque Sallent de Gállego recibe más de 70.000 turistas todos los años, siendo durante la temporada de esquí uno de los puntos con mayor grado de ocupación del país.
Destaca el rápido crecimiento que ha tenido Escarrilla por su emplazamiento al borde de la carretera A-136 y en el centro geográfico del valle. Y justifica su idoneidad porque la localidad es punto de partida de diversas excursiones, muchas en torno al cercano embalse de Escarra y sus cimas aledañas, y el aumento de la afluencia turística y el constante crecimiento de servicios la han convertido en un punto de referencia de toda la zona.
También resalta que si bien antiguamente la economía de la zona estaba basada en la ganadería extensiva y de montaña, ahora el sector servicios absorbe el 98.99% de la actividad ya que las nuevas generaciones se han ido reconvirtiendo hacia el turismo.
