El Cordobés agradece a la afición de Huesca y a los equipos médicos de la plaza y el hospital su trato tras la cogida que sufrió
El torero sufrió una cogida en el muslo de 20 centímetros el pasado sábado y tuvo que ser trasladado al hospital.
Después de la cogida que sufrió el pasado sábado en la plaza de toros de Huesca, Manuel Díaz 'El Cordobés' ha querido agradecer el trato recibido por la afición oscense y por el equipo médico que le atendió en el coso.
Fue el primer toro de la tarde, de la ganadería de Salvador Domecq, el que arrolló a El Cordobés al recibirlo con el capote. El animal lo embistió y le dio una voltereta que se saldó con una herida en la mano izquierda y una cornada en el muslo que fue limpia y sin lesión muscular, aunque de 20 centímetros de profundidad.
Con rapidez, El Cordobés pasó a la enfermería, donde fue intervenido, según el parte, de "una cornada en el triángulo de Scarpa derecho, con un trayecto superior externo y otro inferior interno de 20 centímetros, de pronóstico grave".
Según el parte médico firmado por el doctor Enrique Crespo, en la mano sufrió "una herida contusa en el segundo dedo, con una fractura conminuta (en la que el hueso de rompe en dos o más fragmentos) de la falange media, con severo traumatismo en partes blandas".
Fue trasladado al hospital de Huesca y, tras varias horas en las que no presentó fiebre ni sangró por los drenajes, el domingo por la tarde pudo viajar a Sevilla para reunirse con sus familiares.
Este lunes, que estaba previsto que toreara en la plaza de Calatayud con motivo de las fiestas de San Roque, ha publicado un mensaje lleno de afecto hacia los oscenses:
"De vuelta a casa y más que agradecido a la afición de Huesca, al gran equipo médico de la plaza de toros, al equipo del Hospital San Jorge y por supuesto a cada uno de vosotros que os habéis preocupado por mí… sigo la recuperación más cerca de mi familia y pensando en acortar todos los tiempos para estar de vuelta lo antes posible".
