Lluvia de camisetas, empujones, mairalesas llorando... la "vergonzosa" cabalgata de Huesca
Las peñas se solidarizan con la charanga de Tardienta, que tuvo que dejar de tocar por riesgo hacia su integridad física, y denuncian algunos comportamientos incívicos en el desfile posterior al chupinazo.
"¡33 años tocando en Huesca y realizando este gran chupinazo, que es una fiesta espectacular! Pero jamás habíamos vivido lo de hoy... La falta de respeto a la fiesta elevada al cuadrado". Así empezaba el mensaje que colgó a última hora del día 9 la charanga de Tardienta en sus redes sociales y que fue republicado por las peñas recreativas de Huesca para denunciar los comportamientos "vergonzosos" que se vieron durante la cabalgata y llamar a la reflexión de los jóvenes.
Como explicó Alfonso Juan, de la charanga de Tardienta, tras el disparo del cohete empezaron a bajar desde la plaza de la Catedral por la costanilla de Santiago. Iban de los últimos, con la peña Los 30. "Arriba comenzaron ya los empujones, algo que es normal, pero se fueron intensificando hasta el punto de que un compañero recibió un golpe en el instrumento que le hizo mal en los labios. Y luego ya volaron camisetas empapadas de vino y objetos que nos pegaban continuamente en las caras y en los instrumentos. Nunca habíamos visto algo así", relató. De hecho, llegó un momento que tuvieron que dejar de tocar y bajar andando hasta el Coso "porque estaba en riesgo nuestra integridad", subrayó.
Con este mensaje, quieren concienciar a la gente de que estas actitudes suponen "una falta de respeto hacia quienes estamos intentando animar la fiesta". Y aludieron al reciente caso de una agresión a un compañero de otra charanga durante las fiestas de San Fermín que recibió un perdigonazo. "Ya sabemos que muchas veces no se hacen las cosas con maldad, pero solo pedimos que tengan más de cuidado", señaló.
Las peñas se solidarizaron y se unieron en la condena. Para Fran Ferrer, de La Parrilla, "hay que cambiar lo que ocurre en la cabalgata porque es vergonzoso ya que las charangas son al fin y al cabo trabajadores que se están ganando el pan y nadie tiene por qué tirarles camisetas y hacerles daño".
Jennifer Iglesias, de la Zoiti, asegura que este año esperaban una mayor aglomeración por el repunte de 1.000 nuevos socios entre las peñas, "pero hay gente a la que todo le vale y hubo lanzamientos de camisetas, patadas, empujones...". En su caso, tuvieron que formar un doble anillos de seguridad para hacer hueco a su charanga "porque era imposible tocar".
Ana Lite, de la 10 d’Agosto, también critica que "la bajada de la Catedral fue una lluvia de camisetas que te venía de todos lados". Las farolas de la costanilla seguían 24 horas después llenas de restos de ropa. Varias mairalesas acabaron llorando en las carrozas "porque no es justo que estés pasando una mañana feliz y un gracioso te manche el vestido de vino con una pistola".
Son reiterados los llamamientos que han hecho las peñas en los últimos años para intentar desterrar la imagen de la marea rojiza que ahora invade el chupinazo. "Desgraciadamente el morado ya es una tradición porque la gente lleva 30 años manchándose con vino, pero seguiremos luchando por ir de blanco y verde", afirma Fran Ferrer. También Jennifer Iglesias considera "una pena que la imagen que se vea sea la de una masa morada", aunque ve muy difícil atajar esta costumbre.
Tomás Hernández, de Los 30, lamenta que "cuando hay una marabunta de gente, es muy difícil de manejar, solo si hay mano dura y entonces igual se te echan encima porque cada vez hay más descontrol", advierte. En este sentido, Ana Lite denuncia que "no hay respeto, bajan a lo que bajan".
Llamamiento para no tirar objetos a la plaza de toros
Por otra parte, las peñas, Tauroemoción, la Policía Nacional y el Ayuntamiento de Huesca emitieron este jueves un comunicado conjunto para advertir de que si se arrojan objetos al ruedo durante la feria taurina, como ha ocurrido otros años con latas de cerveza, trabajarán conjuntamente para identificar a los culpables, que pueden incurrir en sanciones económicas y, en caso de causar lesiones mayores, en delitos penales.
