Una marea azul turquesa ha inundado este domingo las calles de Huesca de solidaridad en la 11ª Marcha Aspace, que ha vuelto a batir su récord con un total de 9.194 inscritos (800 más que en la anterior edición). Entre ellos, por ejemplo, familias del colegio Pirineos-Pyrénées, una de las cuales es usuaria de esta entidad que atiende a 181 personas en toda la provincia con parálisis cerebral y discapacidades afines y que caminaba con los ojos enrasados de lágrimas. "Me apetece venir siempre porque me emociona ver a tanta gente que nos apoya. Ahora, se necesitan más recursos humanos y económicos", ha afirmado Isabel Valero.

Luis Martínez, presidente de Aspace Huesca, se mostraba muy agradecido por este masivo respaldo de la sociedad oscense: "Tenemos mucha suerte con Huesca porque hemos consolidado la marcha y cada vez hay más inscritos. La gente sigue creyendo en lo que hacemos, nos acompaña y quiere vivir con nosotros este día. Ahora, que disfruten y sobre todo que continúen apoyándonos de esta manera".

La inscripción es gratuita pero se recogen donativos que cada año se destinan a un proyecto distinto. Esta vez, la recaudación será para la construcción de una residencia de 15 plazas en el centro de Huesca. "La camiseta de la marcha lleva este año el lema de 'Más mayores' porque mejorando la calidad de vida de nuestros usuarios conseguimos también una mayor longevidad y y necesitamos más sitio para que puedan quedarse a vivir con nosotros", ha resaltado. Las donaciones siguen abiertas en su web www.aspacehuesca.org.

Tras una sonora cuenta atrás, la marcha ha partido a las 10.00 de la explanada exterior del Palacio de Congresos. Por delante, una ruta  circular de 18 kilómetros por las calles de Huesca y algunos de los municipios incorporados del entorno con dos avituallamientos y una comida final a base de cocido de garbanzos de Lierta. Entre todo, se utilizarán 1.300 litros de cerveza, 300 kg de garbanzos, 250 kg de verduras, 5.000 kg de fruta, 2.500 barras de pan, 350 botellas de vino y 500 litros de refrescos.

Familias, trabajadores y voluntarios han colaborado para que los propios usuarios de Aspace hayan podido participar un año más. Una de ellas es María Bautista. Tiene 31 años y lleva desde los 18 en esta entidad. "Cada año se organiza mejor y la gente está contenta. Es una marcha muy importante para que la gente nos conozca", ha destacado. 

Alejandro Reche y Laura Gabás han llevado también a su hijo Darío, de 9 años, que nació prematuro y sufre una parálisis cerebral que le afecta a su capacidad motora y de coordinación.  "Es una pasada y un escaparate fenomenal para visibilizar todas las necesidades de las personas con parálisis cerebral y otras discapacidades similares. Además, ayuda a normalizarlo y a saber que es algo con lo que hay que convivir", han manifestado poco antes de tomar la salida. Su hijo fue usuario del colegio de Aspace en la etapa infantil y ahora en Primaria acude al colegio público Juan XXIII. Sin embargo sigue recibiendo atención ambulatoria con un nuevo sistema que le permite recibir la rehabilitación en su propio entorno en lugar de tener que acudir al centro. "Ha sido un gran avance porque trabajan con las necesidades reales que tiene en casa y eso le enseña a ser autónomo", han valorado.

Mientras, José Ángel Gracia ha ido también con su familia empujando la silla de su hijo Pablo, de 25 años, que vive de forma fija en la residencia. "Es impresionante que tanta gente apoye una causa social como esta", ha afirmado, además de destacar la importancia de esta movilización para que las instituciones también lo valoren ya que "si no contamos con su apoyo, será imposible poder construir la residencia, que cada vez será más necesaria porque sigue creciendo el número de usuarios con una vida más larga", ha advertido.

Récord también de representantes políticos

El récord no ha sido solo de participantes, también de representantes políticos de todas las formaciones dada la cercanía del inicio de la campaña electoral. Entre ellos, el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, la delegada del Gobierno, Rosa Serrano, la vicepresidenta de las Cortes de Aragón, María Rodrigo, las consejeras Marta Gastón y Mariví Broto, el alcalde de Huesca, Luis Felipe, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, la diputada provincial Sofía Avellanas, o la consejera de Cultura de la Comarca Hoya de Huesca, Beatriz Calvo. Cada uno de ellos han hecho la salida de la marcha tirando de un usuario o usuaria de Aspace en silla de ruedas como gesto simbólico.

Para Lambán, las cifras de esta marcha son "una muestra evidente de la fibra moral que caracteriza a la sociedad aragonesa y particularmente a la altoaragonesa porque aquí se produce una concentración de compromiso cívico y solidaridad, valores de los que nos sentimos tan orgullosos". Y ha calificado de "admirable" el trabajo de Aspace "y que tanta gente se involucre en este acto". 

Rubén Darío Núñez

Mientras, Luis Felipe también ha aplaudido la respuesta de la ciudad y ha destacado el "compromiso cada vez mayor de las instituciones" con Aspace. Y la consejera Beatriz Calvo ha reconocido que "da gusto ver esta explanada con más de 9.000 personas inscritas", al tiempo que ha agradecido el papel de entidad "y sobre todo en el mundo rural, donde es más complicado tener discapacidad porque hay menos medios".

Por su parte, Jorge Azcón ha dado la enhorabuena a la organización porque "la Marcha Aspace es uno de los acontecimientos sociales de la Comunidad y un éxito sin precedentes donde juntamos el afán solidario de la gente con las personas con discapacidad y sus cuidadores". Y se ha comprometido a ayudar a la entidad para la construcción de la residencia si llega al Gobierno. Le ha acompañado la candidata a la alcaldía de Huesca, Lorena Orduna, quien ha agradecido a los oscenses "cómo se vuelcan con un evento tan importante para los usuarios de Aspace".

Más de 600 voluntarios

Más de 150 empresas y 600 voluntarios -entre ellos el Ejército, Peña Guara, alumnos del Grado de Ciencias Ambientales o Cruz Roja- han colaborado en la organización de esta marcha. Entre ellos, por ejemplo, el cocinero Antonio Arazo, que junto a otros 17 veteranos de los fogones, han preparado con mimo el cocido de garbanzos de Lierta, otra de las tradiciones de la Marcha Aspace. "Es muy bonito que cuenten con nuestra ayuda porque participamos de buena gana", ha señalado.

También ha vuelto a colaborar Lourdes Bescós, que trabajó más de 30 años en Aspace y ahora que está jubilada participa como voluntaria en la organización. "Es mucho trabajo pero merece la pena porque ayudamos a que la gente conozca la parálisis y los problemas que tiene los chavales y, además, se recauda dinero para atender las necesidades", ha dicho.

Además, para el control del recorrido cuentan con profesionales de la Guardia Civil de Tráfico, Protección Civil de la Comarca, Policía Local y Brigadas de los Servicios Generales del Ayuntamiento de Huesca.