Las recientes nevadas han insuflado aún más optimismo al sector de la nieve de cara al último tercio de la temporada (han pasado ya 84 de los 128 días). Y es que febrero ha cumplido con su sobrenombre de ‘el agosto del invierno’ ya que estaciones, hoteles y otros negocios asociados como restaurantes y tiendas de alquiler de material han colgado el cartel de completo. De hecho, algunos lo califican incluso de "apoteósico".

A estas alturas, los centros ofrecen 287 km esquiables, el 80% de todo el dominio del Pirineo oscense. A raíz de las últimas precipitaciones, los espesores en Astún-Candanchú rozan los 250 cm, se superan también los 200 en Formigal-Panticosa y Cerler alcanza los 80. A ellos hay que sumar otros 40 que suman entre los seis espacios nórdicos abiertos (Llanos del Hospital, Panticosa, Candanchú, Linza, Gabardito y Pineta).

Álvaro Luna, director general de Candanchú, hace un buen balance provisional de la temporada ya que pese a la escasez de nieve del primer tercio, a mediados de enero la situación dio un "vuelco radical". «Pasamos de tener unos meses bastante malos en comparación con temporadas anteriores a registrar uno de los mejores febreros de los últimos diez años", valora. Y aunque no han recuperado totalmente el impacto del "flojo comienzo"», confía en que marzo dé el «suficiente empuje» para alcanzar al final un número muy similar de esquiadores a otros años. Por ahora, cree que las buenas condiciones de la nieve están aseguradas hasta el día 15 al menos "y tenemos la esperanza de que vengan más nevadas que podamos acompañar con producción propia si sigue el frío", dice.

La ocupación hotelera de este mes ha sido elevadísima. En el Balneario de Panticosa, los últimos fines de semana han estado llenos o casi, con números muy parecidos a 2022, según su director Jesús González. "En resumen, estamos teniendo una muy buena campaña de invierno tanto de alojamiento como de termalismo", afirma. Y para marzo es muy optimista también "porque aunque las reservas se hacen cada vez más a última hora, esta nieve que acaba de caer hace de efecto llamada y creo que aguantaremos muy bien hasta Semana Santa".

Veronica Lacasa

En el Hotel Aragón Hills de Formigal, tras un arranque de temporada "complicado", en el resto están teniendo cifras similares al año pasado. Este mes, la ocupación en fin de semana está entre el 80 y el 90%. Y en marzo esperan seguir la misma tendencia «aunque es un cliente más de última hora porque se espera a ver la calidad de la nieve», aclara Jorge Gavín.

Mientras, en Benasque, el Hotel Llibrada y su restaurante La Brasa están registrando un febrero "apoteósico", según María Paz Güerri. «Desde el 25 de enero estamos teniendo la perfección con lleno absoluto gracias a las semanas blancas y los carnavales, buen tiempo y buena nieve», destaca. Para la Cincomarzada, las reservas están casi al 90%. En su caso, tienen 14 personas en plantilla y hubieran podido contratar más, pero se queja de que no han podido encontrar gente disponible.

"Lo que dejas de ingresar ya no lo recuperas"

Por su parte, el Asador Estanés, de Candanchú, se felicita de que tras un inicio flojo por la falta de nieve "ahora va sobre ruedas", según Sergio Pueyo. De hecho, tiene el restaurante lleno todos los fines de semana hasta el 18 de marzo. "No está siendo como la del año pasado porque lo que dejas de ingresar ya no lo recuperas, pero la temporada está bien", resume.

Las tiendas de alquiler también hacen un balance positivo. La Boutique Nepal de Formigal lleva 20 años abierta «y 2022 ya fue de récord de facturación pero este año vamos camino de batirlo porque diciembre y enero se trabajó muy bien aunque no hubiera mucha nieve y febrero ha sido espectacular», se congratula Javier Mimbrera. Está convencido de que con estas últimas nevadas "se reactivarán las ganas de la gente", aunque recalca que "para nosotros, más que la nieve, lo importante es que haya sol, con eso a trabajar".

Y Deportes Güerri, en Cerler, está tenido una febrero "buenísimo". No obstante, María José Berasategui admite que la campaña ha sido "irregular" y que en general está "un poco por debajo del año pasado porque lo perdido al principio, perdido está". Con todo, tiene buenas perspectivas para la Cincomarzada y San José.