Reabre al tráfico la N-230 a la altura de Sopeira tras el grave desprendimiento

A las 5.50 se ha procedido al cierre de la vía entre los kilómetros 114 y 115, cerca del límite en Cataluña. Siete horas después se ha podido habilitar un carril para dar paso alternativo.

La carretera ha quedado limpia y los socavones reparados, pero se mantiene paso alternativo por un carril.
La carretera ha quedado limpia y los socavones reparados, pero se mantiene paso alternativo por un carril.
Heraldo

Un desprendimiento de rocas ha mantenido cortada siete horas la N-230 a la altura de la localidad de Santorens, en el municipio ribagorzano de Sopeira. Ha ocurrido durante la madruga, lo que ha evitado daños personales en esta vía que comunica Lérida con el valle de Arán atravesando la provincia de Huesca y que normalmente es muy transitada.

El incidente se ha producido entre los kilómetros 114.5 y 115 a las 5.50. Los bloques de piedra ocuparon toda la calzada y fue necesario interrumpir totalmente la circulación, que se desvió desde Puente de Montañana por la C-1311 y desde Pont de Suert por la N-260. El corte impidió a primera hora de la mañana el paso del autobús de la línea regular que va a Barcelona y del transporte escolar, de forma que los alumnos de Arén y Puente de Montañana que estudian en Pont de Suert se quedaron sin clase.

Siete horas después, los servicios de mantenimiento de Carreteras han podido retirar parte del material desprendido y reparar los socavones y la carretera se ha reabierto al tráfico, aunque con paso alternativo por un carril.   

Desprendimiento en la N-230
Desprendimiento en la N-230
Servei Català de Trànsit

El alcalde de Sopeira, José María Ariño, ha explicado que se trata de una zona con grandes taludes que se pudo ver afectada por la lluvia y la intensa nevada del lunes. "Es una zona peligrosa", ha asegurado.

Esta no es ha sido la única incidencia en las carreteras oscenses durante las últimas horas. Una nevada dejó este lunes a varios camiones y coches atascados en los puertos de la N-260 entre Castejón de Sos y Laspaúles. Las nevadas colapsaron los accesos a Benasque y dejaron sin luz al valle de Chistau. 

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anuncia para este martes en Aragón predominio de cielo nuboso o cubierto, con precipitaciones desde la mañana en el Sistema Ibérico, que irán extendiéndose al resto de forma más débil durante la segunda mitad del día y remitirán a últimas horas, y sin descartar que en el sur de Teruel sean localmente persistentes.

La cota de nieve se situará en el Pirineo en torno a los 2.000-2.400 metros y se esperan por la mañana estratos bajos y brumas en la depresión del Ebro, con probables bancos de niebla.

Las temperaturas experimentarán un ascenso generalizado, localmente notable en el caso de las mínimas en el Pirineo y el Bajo Aragón, y en el de las máximas en la mitad norte. Habrá heladas débiles en puntos del Pirineo. Por capitales de provincia, las temperaturas oscilarán entre 6 grados de mínima y 15 de máxima de Huesca, los 8 y 15 grados de Teruel y los 9 y 14 de Zaragoza.

El viento soplará del oeste en el Sistema Ibérico, sin descartar que puntualmente se dé alguna racha muy fuerte por la tarde, y variable flojo en el resto.

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