Huesca tendrá una nueva pista de patinaje para competición a principios de 2023

Las obras de la instalación, con un coste de más de 423.600 euros, ya han comenzado. Está junto al Complejo Deportivo San Jorge y completa el corredor deportivo que se ido diseñando alrededor del cerro. 

Inicio de las obras de construcción de la pista de patinaje.
Inicio de las obras de construcción de la pista de patinaje.
Heraldo.es

Huesca tendrá  una nueva una pista de patinaje. La instalación podrá homologarse  para la competición. La obras de este nuevo equipamiento, que completa el corredor deportivo del entorno del cerro de San Jorge, que supondrá una inversión de más de 423.600 euros. Los trabajos ya han comenzado. 

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha visitado este viernes los trabajos y ha incidido en que con esta nueva infraestructura "se da respuesta a una reivindicación muy importante de clubes y asociaciones que llevaban tiempo solicitando al Ayuntamiento la construcción de una pista de patinaje de velocidad en la ciudad". Según ha dicho, con el objetivo de fomentar el deporte y ámbitos de vida saludable, "será de uso libre para público de todas las edades". Esta instalación, que se ubica justo en la parte trasera del Centro Deportivo San Jorge, estará adaptada a los criterios de la Federación Internacional de Patinaje.

Su puesta en servicio, a principios del año 2023, completará el corredor deportivo del cerro de San Jorge, donde se han construido y acondicionado diferentes espacios de uso libre, como el circuito de calistenia estrenado en 2020 o el recorrido de inercias de 386 metros con curvas, relieves, obstáculos y tramos con pendientes de distintos desniveles en el que se invirtieron 120.000 euros hace un año. Además, se ha acondicionado del andador del cerro y se ha mejorado la iluminación en toda la zona.

La nueva pista de patinaje, cuyas obras tienen un plazo de ejecución de cuatro meses, dispondrá de una superficie de 3.400 metros cuadrados entre la propia pista y su zona interior. Tendrá una longitud de 200 metros. Estará cerrada a lo largo del borde exterior con una valla de 1,2 metros con pasamanos y contará con varias puertas de entrada, tal y como marca la Federación. Se construirá con pavimento drenante y se recogerá el agua de lluvia a través de un conjunto de sumideros colocados en su anillo interior. Además, dispondrá de iluminación para que se pueda utilizar sin problemas durante los meses de invierno.

El proyecto también contempla la urbanización de la zona contigua a esta pista, es decir, que en su exterior se acometerán actuaciones como la construcción de un camino para bicicletas o la plantación de arbolado y de zonas de pradera natural.

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