La Gendarmería francesa ha localizado este jueves el cuerpo sin vida del montañero galo que permanecía desaparecido desde la tarde del martes en el entorno del pico Gran Facha (3.005 metros) de Panticosa, en la zona fronteriza entre España y Francia. Los especialistas de rescate franceses han evacuado el cadáver en helicóptero por lo que se ha desactivado el operativo en el que participaba también el Greim de la Guardia Civil. 

La víctima estaba recorriendo una ruta con otro compatriota con el que hizo cima en la Gran Facha. Según explicó este, decidieron separarse en el descenso, en una zona de destrepe, para evitar tirarse piedras uno a otro, y ya no volvió a verlo. A pesar de que desandó el caminó y regresó a la cumbre, no encontró ni rastro de él.

El acompañante dio la alerta en el refugio de Respomuso (Sallent de Gállego). Según un trabajador de este centro, en las primeras horas estuvieron buscando agentes de la Gendarmería francesa, ya que la montaña da a las dos vertientes, y el miércoles se incorporó al operativo la Guardia Civil con agentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de Panticosa y el helicóptero con base en Huesca. 

El rastreo se centró en la zona de la Gran Facha, uno de los tres miles del valle de Tena al que se asciende desde el balneario de Panticosa. Para subir al pico es necesario realizar una trepada y superar algunas peligrosas hendiduras. Apenas han trascendido datos de la víctima, salvo que es de nacionalidad francesa.

Desde principios de junio han muerto tres personas en accidentes de montaña en el Pirineo aragonés. La primera fue una montañera barcelonesa de 38 años que se precipitó desde una cresta en Sahún. Le siguió un parapentista, también de Barcelona, de 52 años, al que le se plegó la vela y se golpeó contra una ladera en el pico Gallinero de Cerler. La última víctima, el pasado 12 de julio, fue una madrileña de 39 años que se despeñó en el pico del Infierno, en Panticosa, cerca del área donde ahora se estaba buscando al montañero francés fallecido.