Bielsa logra por fin una compensación por el uso de las centrales hidroeléctricas

El Ayuntamiento recibirá de la CHE unos 18.000 euros anuales por la ocupación del monte público de Barrosa. El alcalde, Miguel Noguero, valora este "importante paso" en la lucha por la restitución territorial.

El ibón de Urdiceto, represado, donde está la central hidroeléctrica revertido y cuya viabilidad se estudia ahora.
El ibón de Urdiceto, represado, donde está la central hidroeléctrica revertida.
Ayuntamiento de Bielsa

El Ayuntamiento de Bielsa recibirá por fin una compensación económica por la explotación de la central hidroeléctrica de Barrosa tras una larga lucha administrativa y judicial. La Confederación Hidrográfica del Ebro abonará unos 18.000 euros al año por la ocupación de monte público por el que pasan las tuberías, una vez recuperada la concesión. 

Hace más de dos años, las empresas hidroeléctricas que trabajaban para la CHE solicitaron permiso de obras al Ayuntamiento para mejoras en los canales y montes de utilidad pública en el término municipal de Bielsa, algo que el Ayuntamiento les negó alegando que, de entrada, no tenían autorización para ocupar dichos espacios, instándoles a solicitarlo. 

Tras las conversaciones y reuniones mantenidas, la Confederación inició los trámites para dicha ocupación a través del Inaga, organismo al que el Ayuntamiento de Bielsa cedió la elaboración del estudio preceptivo, “que terminó dando la razón al consistorio en lo referente a la restitución económica por la ocupación del monte”, explica el alcalde, Miguel Noguero. 

Aunque el estudio solo valora los metros cuadrados de ocupación, "y no tiene en cuenta otras afecciones como ruidos, la salud de nuestros ríos o la falta de caudales en estos", recalca el alcalde, considera que es "un gran paso el hecho de que se reconozca que esos montes no son titularidad de la CHE, sino que están haciendo una ocupación por la que deben abonar una tasa”.

En el informe del Inaga se otorga una autorización a la Confederación por 30 años, la menor que se puede otorgar, siempre sujeta al pago de la citada contraprestación económica y con la opción de que si alguna de las partes desiste, decae la autorización. Además se deja abierta la posibilidad de futuros ajustes, como puedan ser la cuantía anual o la parte ocupada.

Noguero recuerda que las restituciones territoriales por la afecciones que provocan estas centrales han sido largamente reivindicadas por muchos ayuntamientos y por ello agradece a la presidenta de la CHE el "cambio de posición" respecto a este asunto, así como el buen trabajo que ha realizado el Inaga”. "Esto nos hace albergar la esperanza de una restitución territorial justa por el aprovechamiento hidroeléctrico de nuestra central”, asegura. Y es que hasta ahora, recuerda, siempre les había negado cualquier posibilidad de que la ocupación del monte público se tradujera en una restitución o compensación a los ayuntamientos propietarios de esos terrenos.

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