Las nevadas se intensifican en el Pirineo y llegan tímidamente las esperadas lluvias
Las precipitaciones caídas este viernes, que han obligado a usar cadenas en algunas carreteras, persistirán a lo largo del fin de semana y hasta el lunes.
El mes de marzo parece haber roto la tendencia de la larga sequía invernal. Las nevadas dejaron ya su huella el lunes pero se han intensificado este viernes, cuando también ha vuelto la esperada lluvia, aunque de una forma todavía tímida para las necesidades actuales, con unos 20 litros por metro cuadrado en localidades del valle de Tena o más de 30 en el alto valle del Cinca. A las puertas de la primavera, las previsiones meteorológicas indican que la borrasca continuará durante el sábado y el domingo y al menos en los inicios de la próxima semana.
Las nevadas ya dejaron algunos centímetros en las estaciones de esquí el lunes y continuaron en las jornadas siguientes. En Cerler han caído 35 cm en los dos últimos días, pero la alternancia de la lluvia y la nieve y otras condiciones meteorológicas condicionan los espesores. En Formigal-Panticosa, tras caer 10 cm el lunes y 20 cm en la noche del martes al miércoles, han vuelto a verse copos desde los 1.700 metros, llegando también a lo largo del día a cotar más bajas.
Las carreteras también se han visto afectadas. Las cadenas han sido obligatorias a lo largo de día en Bielsa (A-138 y A-2611), Panticosa (A-2606) y Formigal (A-136), según la Dirección General de Tráfico, aunque por la tarde ya quedaban limitadas a los dos primeros municipios.
La alerta amarilla activada el viernes por nieve, se mantendrá este sábado. Según el parte nivológico de la Aemet, en las próximas horas se esperan precipitaciones intensas. En cotas altas podrían acumularse 20-30 cm de nieve reciente en el Pirineo navarro y la Jacetania, 30-35 en el Alto Gállego y la Ribagorza y 45-50 cm en el Sobrarbe. La cota de nieve variará entre 1.100 y 1.400 metros.
Mucha precaucion este fin de semana pic.twitter.com/xL7C0yFINX
— A LURTE (@alurte) March 11, 2022
Por otra parte, la acumulación de nieve durante toda la semana ha provocado un aumento del nivel de riesgo de aludes. La Aemet lo sitúa en nivel 4 (sobre 5) en el Alto Gállego, la Ribagorza y el Sobrarbe por encima de 2.200 metros y 3, por debajo.
La situación obligó el jueves a cerrar una pista de la umbría de Ordesa, desde el puente de Sarratieto hasta el desvío de las cascadas del Estrecho. El Parque Nacional informó de que se tomó la decisión porque con las últimas nieves caídas y las que se siguen anunciando, las posibles avalanchas en algunos barrancos pueden alcanzar el camino. Avisaba de que esto no significa que el resto del valle esté libre de riesgo sino que por la verticalidad de estas paredes y dado que algunos barrancos están ya en parte colmatados por aludes anteriores, es muy probable que si caen otros las sobrepasen fácilmente.
