Huesca licita por 1,8 millones la última fase de la reforma de Ramón y Cajal, que estará acabada en el verano de 2022
Los trabajos se interrumpirán entre el 24 de diciembre y el 6 de enero para no afectar a la campaña navideña del pequeño comercio.
El Ayuntamiento de Huesca acaba de sacar a licitación la tercera y última fase de las obras de reurbanización del paseo Ramón y Cajal por más de 1,8 millones de euros. El plazo de ejecución es de nueve meses por los que estará acabada en el verano de 2022 tras una inversión global de 6,5 millones de euros para reformar una de las principales arterias de la ciudad que no se había tocado en los últimos 40 años.
Este último tramo entre la calle Camila Gracia y el entronque con la plaza de Santo Domingo continuará en la línea de los dos realizados en 2019 y 2020 con una ampliación de aceras hasta los 7 metros (permitirían la instalación eventual de casetas para la venta ambulante o ferias temáticas), la reducción a dos carriles en la calzada central y la incorporación de otro para bicicletas; la renovación de las redes en mal estado de agua, alcantarillado y alumbrado, añadiendo canalizaciones para telecomunicaciones; y la preservación del arbolado de cedros existente.
Las empresas interesadas tienen hasta el 23 de septiembre para presentar sus ofertas. El precio es el criterio más valorado (49 sobre 100 puntos), aunque también se tendrá en cuenta otros como la posible reducción del plazo de ejecución o el compromiso de instalar la oficina de atención a vecinos y comerciantes para facilitar información relacionada con las incidencias de la obra.
El pliego también establece que en defensa de los intereses de los pequeños comerciantes se paralizarán los trabajos durante la campaña de Navidad, desde el 24 de diciembre de 2021 al 6 de enero de 2022, evitando de este modo molestias que puedan interferir con la actividad comercial normal.
La transformación de este paseo, antiguo tramo urbano de la carretera N-240, era el proyecto urbanístico más ambicioso del PSOE tras llegar a la alcaldía de Huesca en 2015, relegando la intervención que había impulsado el PP en el anterior mandato para peatonalizar el Coso. Una vez concluida, la siguiente prioridad para el equipo de gobierno socialista es la avenida Martínez de Velasco, la antigua travesía de la N-330, que mantiene la misma fisonomía desde los años 70 y sufrirá una reforma de igual calado que en Ramón y Cajal tras un proceso previo de participación ciudadana.
