El Ministerio para la Transición Ecológica y la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) han respondido a la urgencia planteada por los regantes y han iniciado este mismo martes las obras para reparar la rotura del Canal de Aragón y Cataluña producida el lunes y que ha dejado sin suministro a 20.000 hectáreas en plena campaña de riego, además de inundar campos y granjas en la zona de Tamarite de Litera.

Por la mañana ya se ha iniciado la demolición de la solera de la conducción. "La CHE  estima que los trabajos para recuperar la zona hundida se alarguen durante una semana", según han comentado el presidente de la Comunidad General de Regantes, José Luis Pérez. 

El mismo lunes se desplazaron hasta la zona donde se produjo la rotura camiones y excavadoras, que han estado trabajando toda la madrugada para realizar una ataguía (una pequeña presa) de manera que el tramo dañado quede independizado del resto del canal. Se trata de dejar seca esa parte para poder trabajar en ella de forma que el resto de la infraestructura no afectada esté en servicio, según han explicado desde la CHE. 

Al mismo tiempo que han comenzado las obras, la CHE ha empezado a trabajar en la instalación de un suministro alternativo y provisional para una parte importante de las 20.000 hectáreas afectadas por el corte de suministro, entre los kilómetros 46 y 56 de los 126 que tiene de longitud el canal. Un total de 18.000 ha se podrán regar mediante retrobombeo, pero otra, la situada en la parte central, no se podrá regar con este sistema, han indicado fuentes del organismo de cuenca.

CHE

El retrobombeo estará operativo en dos o tres días, ya que se trabaja también de noche con el objetivo de hacer todo con la mayor urgencia posible, insiste la CHE. José Luis Pérez ha apostillado que esta medida es "coyuntural" y que "lo fundamental, que es la reparación, la CHE la estima en una semana".  "Hemos puesto nuestras esperanzas en que en ese plazo se pueda restablecer el servicio normal del canal y dar a todo el mundo el agua que pida", ha añadido el presidente de la Comunidad General de Regantes, que espera que en un par de días todas las hectáreas puedan abastecerse de agua "en cierta medida".

Desde Confederación no han detallado el coste de esta obra ni los plazos temporales para su finalización, apuntando que "se intentará acometer la actuación en el menor tiempo posible". Sí han comentado que la rotura producida en la solera del canal ha sido "importante". 

El hundimiento provocó que por el socavón se filtrasen millones de litros de agua que arrastraron parte de los terrenos que están debajo del canal y, sobre todo, de la banqueta sobre la cual discurre el camino de servicio (vías de acceso para la conservación y el mantenimiento de las infraestructuras hidráulicas). El mismo lunes se estuvo inspeccionando la zona de la rotura (km 49) para determinar la parte de la sección afectada y valorar la actuación necesaria que hay que realizar. 

Sobre las causas que provocaron esta rotura, la CHE ha señalado que el Canal de Aragón y Cataluña "es una infraestructura centenaria, donde se han ido haciendo actuaciones de conservación pero que está sujeta a este tipo de averías". El hundimiento se ha debido a  "una conjunción de factores como la antigüedad, el tipo de los suelos sobre el que se asienta y el contacto directo del material (hormigón) con el agua"