La Guardia Civil detuvo el pasado fin de semana a un conductor de 48 años y de nacionalidad francesa que llevaba 6 kilos de marihuana en su coche y que intentó darse a la fuga durante 14 kilómetros por la autovía A-23 poniendo en peligro la vida de otros usuarios.

El Juzgado de Guardia de Huesca decretó el ingreso en prisión como supuesto autor de los delitos de tráfico de drogas, contra la seguridad vial y también resistencia grave a agente de la autoridad ya que en el momento de su arresto opuso una gran resistencia.

Según ha informado este martes la Guardia Civil, el sábado se recibió un aviso de un altercado en una estación de servicio de la Hoya de Huesca, donde un cliente había repostado su vehículo y no había abonado el importe, llegando a encararse con los empleados. Al lugar acudió una patrulla de Tardienta.

En el momento de identificar al conductor, éste mostró "gran nerviosismo", según la Guardia Civil, y cuando iban a proceder a realizar un registro superficial del vehículo, el hombre se subió al mismo y se dio a la fuga, saliendo tras él la patrulla y solicitando ayuda de otras patrullas cercanas.

Tras 14 kilómetros de persecución por la N-330 primero y luego por la A-23 en los que el conductor realizo maniobras evasivas que pusieron en peligro su vida y la del resto de los usuarios de la vía, acudió en apoyo una patrulla de Tráfico de la Guardia Civil de Huesca y otra de Fraga.

Finalmente los agentes consiguieron que el vehículo parara en el kilómetro 364 de la autovía A-23, a la altura de la localidad de Igriés. Al apearse, sin embargo, el conductor arremetió con violencia contra los agentes que aún así consiguieron detenerle.

Después de realizar un registro en el interior del maletero del vehículo se localizaron varias bolsas de plástico y botes de cristal con una sustancia verde en su interior que resultó ser marihuana, con un peso total de casi 6 kilos. También hallaron dos navajas en su vestimenta y un machete de más de 40 centímetros de longitud junto al freno de mano.