Sale a licitación el proyecto para construir pisos de alquiler en el solar de la Merced de Huesca
El terreno, donde estuvo el cuartel militar hasta 2014, es propiedad de Suelo y Vivienda de Aragón y se destinará y en la primera fase se acometerán entre 25 y 30 inmuebles de los 90 previstos.
La empresa pública Suelo y Vivienda de Aragón ha sacado a licitación por 208.472 euros (sin IVA) el proyecto de ejecución, y la dirección de obra de la primera fase, de la promoción de viviendas en régimen de arrendamiento en la calle de la Merced de Huesca. Los pisos se edificarán en el solar donde hasta 2014 estaba el cuartel militar del mismo nombre
El terreno se destinará a la construcción de un bloque de viviendas destinadas al alquiler asequible. El edificio contará con alrededor de 90 pisos construidos bajo el estándar Passivhaus (energéticamente eficientes, con un elevado confort interior y asequibles) y que se irán levantando en varias fases.
El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, ha señalado que se da un nuevo paso en este proyecto con el objetivo de comenzar las obras en 2019. Se trata de "una apuesta decidida por la revitalización del casco histórico de Huesca tras el derribo del cuartel de la Merced y la ampliación de la calle", ha señalado.
La primera fase de la promoción comprenderá entre 25 y 32 viviendas. La mayoría será de 2 y 3 dormitorios "con la intención de completar la oferta de vivienda de forma versátil y sin encarecer los alquileres". Con este diseño se pretende abarcar un amplio abanico de modelos de unidades familiares.
La parcela tiene una edificabilidad de 8.848 m². Los bloques serán de planta baja, tres alturas y ático, salvo en los encuentros con la edificación colindante que disminuye a planta baja, dos alturas y ático. La edificación que mirará hacia a la medianera colindante de la calle San Lorenzo tendrá planta baja, dos alturas y ático.
La construcción de las viviendas se realizará siguiendo el estándar Passivhaus. Mediante la excelente calidad térmica de los materiales de cerramiento del edificio (paredes, ventanas y puertas), el uso de las fuentes de calor internas (procedentes de los dispositivos eléctricos que normalmente se usan en los hogares) y la minimización de las pérdidas de ventilación con un sistema controlado con recuperación de calor, la vivienda pasiva no necesita los mecanismos de refrigeración ni calefacción convencionales. La demanda de calefacción es inferior a 15 kWh/m2 al año, lo que supone una reducción de más del 90 % respecto de la media. Consiguiendo un alto grado de confort térmico y acústico interior y una reducción de la factura energética.
En paralelo al proceso de licitación del proyecto se van a realizar las obras de nueva extensión de red eléctrica desde el centro de transformación.
