En Murillo de Gállego apuntan a los días previos a la Semana Santa como claves dentro del arranque de la temporada de aguas bravas, "son fechas de muchos viajes organizados de colegios y supone el pistoletazo de salida de la campaña, además del termómetro para la actividad de la primavera", explica Gonzalo Ortas, de la empresa UR, ubicada en la zona y dedicada al rafting y la aventura. No obstante, y a falta de que llegue esa fecha, todo el sector se muestra muy optimista respecto al devenir de la temporada, apoyando su previsión en la abundancia de nieve caída durante el invierno, que les garantiza un buen caudal durante los meses de actividad.

Tan positivas son las previsiones que Fermín Pérez, de River Guru y presidente de la asociación Gállego Activo, que agrupa las siete compañías de este sector que operan en torno a estas aguas, se atreve a considerar que la temporada podría ser la mejor de los últimos diez años. "A día de hoy hay más nieve que el año pasado y a falta de las lluvias de primavera hay reservas de agua suficientes. Además está empezando a hacer buen tiempo y eso se nota en las reservas", explica Pérez, que cifra en 35.000 los clientes con los que contaron la pasada campaña, solo atendiendo a los servicios de rafting. Un número que se dobla si incluimos el resto de disciplinas y actividades que se practican en la zona.

El hecho de que la Semana Santa este año caiga en fechas más tardías también favorece el movimiento en sus establecimientos. "Además de que existen más posibilidades de que haga buen tiempo en esos días, hay más predisposición para practicar este tipo de deportes, ya que ya ha terminado la temporada de invierno", puntualiza Pérez, que remite a la anterior campaña, cuando las tardías nieves alargaron el tiempo de esquí y restaron público a los ríos en la primavera.

La alentadoras previsiones las comparten en la zona del río Ésera, donde José Martínez, de la empresa Ésera Aventura, utiliza el término "fabulosa" para la temporada que se les presenta y en la que se implican una decena de empresas relacionadas tanto con las aguas bravas como con otros deportes en la parte oriental de la provincia.

En este río el caudal está regulado mediante un acuerdo con el Gobierno de Aragón y la empresa Acciona, que se renueva anualmente con el fin de preservar la oferta de estas actividades. "Nosotros siempre querríamos más, pero se trata de una acción positiva que nos demuestra la predisposición existente", dice Martínez en representación de su sector en la zona.

Cada vez más familias

Tanto en la ribera de uno y otro río coinciden en señalar la apertura de nuevos mercados y públicos como uno de los motivos del auge de su actividad en los últimos años. Los grupos de amigos y estudiantes han dado paso a familias completas. "Se buscan paquetes de multiaventura para poder dar cobertura a los cinco días que suele durar una estancia media", señala Fermín Pérez. Este aumento de clientes hace que también el ritmo de reservas se haya modificado. "Estamos recibiendo peticiones ya para el mes de agosto, algo que antes no pasaba", apunta.